El día 3 de Tamuz, este año sábado 2 de julio, se conmemora el Iortzait- Hilulá, aniversario de la desaparición física del Rebe de Lubavitch.
El mundo se sostiene en mérito a los Tzadikim, hombres justos, que bregan por nosotros. Más aún, un Tzadik que dedicó todo su ser para el bienestar del pueblo judío y de la humanidad general es seguro que también ahora – al igual que Moshé Rabeinu, sobre quien está escrito en el Talmud “tal cual antes estaba parado sirviendo (al pueblo de Israel), también ahora está parado sirviéndolo”- el Rebe brega por el bienestar de este mundo, despertando la benevolencia Divina.
Las enseñanzas del Rebe, a través de sus escritos y de sus alumnos, siguen inspirando a cientos de miles en el camino de la bondad y la santidad, difusión y fortalecimiento de la Torá y de sus preceptos, con amor y alegría. Lo que implica una presencia real de su mensaje tanto a nivel comunitario como individual.
En el día de la elevación de su alma, como está escrito en la Kabalá (Igueret Hakodesh Tania IV, epístola 28) la suma de los méritos del Tzadik a lo largo de toda su vida brilla aquí abajo, en la Tierra, con toda su intensidad, unida simultáneamente con la fuente del alma “arriba”, y “genera salvaciones en plena Tierra” y “logra la expiación por las transgresiones de la generación·”
El 3 de Tamuz honramos el recuerdo del Rebe por su bendita obra, vigente aquí en Argentina y en el mundo entero, para despertar la bendición Divina, e inspirarse en sus enseñanzas.
Se acostumbra a donar tzedaká para sus instituciones; estudiar sus enseñanzas, participar de un farbrenguen- reunión jasídica- en honor a la fecha (este año en particular por el COVID-19 en algún Zoom o plataforma virtual), y tomar buenas decisiones en lo que respecta a la propia conducta en Torá y Mitzvot, y en relación al semejante. Especialmente, en la mitzvá de colocación de Tefilín, encendido de velas de Shabat, estudio de Torá, amor al prójimo, etc.
Quienes desean ser mencionados en plegaria a Hashem frente al sagrado lugar de descanso del Rebe, pueden enviar su pedido, con su nombre y nombre de la madre, (preferentemente en idish o hebreo) a [email protected]
El máximo deseo del Rebe fue alcanzar la llegada del Mashiaj por medio del esfuerzo mancomunado, que esto ya tenga lugar de inmediato!
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