José Ramón Gómez, vicario de la pastoral social del Estado: “La visita de Francisco debe provocar un cambio en las políticas de inmigración, tanto de Estados Unidos como de nuestro país”
El Papa finalizará su viaje a México el próximo miércoles 17 de febrero con la visita a Ciudad Juárez. Los mexicanos confían en que Francisco denuncie el abuso de poder de las mafias fronterizas, sicarios que maltratan o asesinan a los mexicanos que quieren cruzar la valla que separa el país de los Estados Unidos.
José Ramón Gómez, vicario de la pastoral social del Estado señala a Religión Confidencial: “El Pontífice va a decir la verdad. Levantará la realidad de las injusticias”.
El Papa celebrará en Ciudad Juárez una misa multitudinaria frente a la valla fronteriza con Estados Unidos, en la que participarán tanto los mexicanos del país, como aquellos que han cruzado El paso, y han llegado a Texas en Estados Unidos. Del lado mexicano, unas 200.000 personas presenciarán la ceremonia en un sitio conocido como El Punto.
En el otro lado, la diócesis estadounidense de El Paso, ha invitado a sus fieles a que participen en la Eucaristía en el estado Sun Bowl de la Universidad de Texas, gracias a la transmisión en directo que será seguida a través de pantallas gigantes.
El estadio tiene capacidad para 50.000 personas. El obispo de de la diócesis de El Paso, Mark J.Seitz, ha llamado a esta celebración “Dos naciones, una fe”. La misa será precedida por un concierto de música religiosa del cantante Tony Meléndez. Ciudad Juárez (México) y la texana El Paso (EEUU) forman una única metrópolis de unos 2,5 millones de habitantes.
Los mexicanos de Ciudad Juárez confían en que la visita de Francisco produzca cambios. “Las políticas de migración tanto mexicano como estadounidense, es causante también de tanto sufrimiento. Niños abandonados que se han quedado sin padres, asesinados por las mafias fronterizas, que los esclavizan, mujeres maltratadas y mucha pobreza”, señala a Religión Confidencial el padre José Ramón Gómez, vicario de la pastoral social de México.
La Iglesia católica dispone de tres casas de migrantes en Ciudad Juárez con capacidad para 300 personas. En estas instalaciones, acogen a los mexicanos que quieren cruzar la frontera debido a sus pésimas condiciones de vida. Les proporcionan alimentos, ropa y consuelo.
“En Ciudad Juárez existe mucha violencia, prolifera la trata de mujeres y las asesinan si no se pliegan a estas condiciones. Es una zona fronteriza por donde pasan los migrantes buscando el sueño americano”, explica José Ramón Gómez.
Violencia familiar y sectas
La violencia familiar, la extensión del secularismo y de las sectas, son otros problemas que padece el país. “A pesar de estas dificultades, en México todavía predomina la fe. Es la segunda nación con mayor número de católicos”, señala a este confidencial José Ramón Gómez, también secretario ejecutivo de la Conferencia Episcopal Mexicana.
Además de la misa multitudinaria, el Santo Padre visitará el centro penitenciario (CeReSo número 3), mantendrá un encuentro con el mundo del trabajo y acudirá al seminario diocesano.
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