Coronavirus en la Argentina: la Iglesia pidió que se evalúe la apertura gradual de las celebraciones religiosas

Coronavirus en la Argentina: la Iglesia pidió que se evalúe la apertura gradual de las celebraciones religiosas

Monseñor Ojea, presidente del Episcopado, transmitió al Gobierno el pedido para evaluar la apertura gradual de las misas

La Iglesia le propuso al Gobierno que al analizar la apertura progresiva de la cuarentena obligatoria contemple la posibilidad de flexibilizar la concurrencia de los fieles a las misas y celebraciones religiosas, vedadas hoy por la pandemia del coronavirus .

La inquietud fue transmitida por el titular del Episcopado, Oscar Ojea , y el secretario general, Carlos Malfa , al secretario de Culto, Guillermo Oliveri , en un encuentro que mantuvieron hoy en la sede eclesiástica de Suipacha 1034, en el que analizaron la ayuda social por la emrgencia. El funcionario se comprometió a trasladar la inquietud al presidente Alberto Fernández y fuentes gubernamentales explicaron a LA NACION que la decisión quedará en manos del ministro de Salud, Ginés González García , la autoridad competente en la definición de los alcances de la cuarentena.

 

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"No se espera una respuesta inmediata. Ni es un pedido para que se aplique ya, sino para que se evalúe cuando se tome la decisión de flexibilizar el aislamiento", explicaron voceros del Episcopado.

Según pudo saber LA NACION , Ojea y Malfa enviaron ayer una carta al resto de los obispos, en la que recuerdan que en la última reunión que las autoridades del Episcopado mantuvieron con Fernández "se pidió a la Iglesia colaboración para el cumplimiento de la cuarentena". En ese momento, los obispos solicitaron la libre circulación de los ministros de culto para la asistencia religiosa.

Al mismo tiempo, les informan que, al cumplirse un mes de ese encuentro, se reunieron ayer con Oliveri y, ante la llamada administración de la cuarentena, le solicitaron la posibilidad de evaluar una "apertura gradual de la celebración de la Eucaristía con los debidos recaudos sanitarios".

Fuentes del Episcopado revelaron que la idea surgió "ante las flexibilizaciones que se proponen, especialmente en el interior". Dejaron en claro que "los obispos aceptarán las decisiones que tome el Gobierno atendiendo las normas sanitarias" y no se espera una respuesta inmediata", según consignó un cable de la agencia Télam.

La idea de una posible apertura gradual de la cuarentena en los templos religiosos no es compartida del mismo modo en las distintas diócesis. Muchos sacerdotes y fieles tienen más de 65 años y una concurrencia masiva potenciaría el peligro para los grupos de riesgo. Ayer se supo, por ejemplo, que en España murieron 70 sacerdotes por la pandemia.

Renudación gradual

La comisión ejecutiva que preside Ojea recibió la semana pasada una carta personal del titular de la Comisión de Fe y Cultura y arzobispo de La Plata, Víctor Fernández, que incluía propuestas para pensar en una reanudación gradual de las celebraciones, sin dejar de acompañar la preocupación sanitaria de las autoridades.

Allí se sugería garantizar una distancia de dos metros entre las personas, no permitir más de dos personas por banco, espaciar los bancos, evitar las filas para comulgar -para lo cual los sacerdotes se acercaría a los extremos de cada banco para dar la comunión, evitar misas con fieles en los santuarios más concurridos, omitir el tradicional saludo de la paz y todo contacto físico.

La carta del arzobispo Fernández señalaba expresamente que los obispos son conscientes de que "exponerse al contagio es una irresponsabilidad, sobre todo porque implica exponer a otros al contagio e indirectamente puede favorecer una situación de crisis sanitaria que no queremos ver en nuestro país", según pudo saber LA NACION .

Desde el avance del coronavirus, varios obispos dispensaron a los fueles del precepto dominical (la obligatoriedad de ir a misa los domingos), como lo hizo el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, antes de Semana Santa.

 

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