Con el lema "Soñemos, acompañemos y custodiemos la Catequesis", catequistas y agentes de pastoral de la arquidiócesis de Buenos Aires participaron el 13 de marzo de su encuentro arquidiocesano.

En el comienzo del encuentro, que fue transmitido a través de YouTube, los catequistas hicieron un repaso de las actividades que se llevaron a cabo durante 2020, en modalidad virtual, sujetas a las condiciones de la pandemia.

El encuentro tuvo como centro la figura de San José, quien “soñó, acompañó y custodió a la Sagrada Familia”. En ese sentido, reflexionaron sobre el logo del encuentro: “La mano del Padre nos sostiene siempre. Sostiene nuestros sueños y anhelos, nuestros desconciertos y nuestras ganas de anunciar y acompañar tantas vidas que Él pone en nuestro camino”, afirmaron. “Si nos sabemos sostenidos en la palma de su mano, nuestra tarea cobra una dimensión amorosa, que trasciende nuestras fuerzas humanas y “nos lanza con valentía a tantos corazones que se convierten en tierra de misión”.

Siguiendo el primer verbo del lema, “soñar”, la doctora María Verónica Talamé profundizó luego sobre “cómo soñar sin después dudar”. Su exposición estuvo basada en la anunciación que San José recibió en sus sueños. En sus palabras, tomando como referencia la vocación a la que Dios llamó a San José, la doctora animó a los catequistas a repensar la propia vocación, y a “renovar el amor a Jesús en este servicio concreto de la catequesis”.

Los momentos de animación y oración cantada estuvieron a cargo del intérprete católico Maxi Larghi. Durante el encuentro, desde sus hogares, los participantes iban compartiendo sus impresiones y resonancias a través del chat.

Luego, tomando el segundo verbo del lema: “Acompañar”, el padre Emmanuel Sicre SJ propuso pensar juntos qué es acompañar la catequesis. Para ello animó a “estar presentes de forma completa, con todo lo que somos”, e invitó a “hacer comunidad, caminar juntos”, porque “no existe una catequesis aislada de la comunidad”. Y finalmente, compartió otra clave: “Saber aprender” de quienes están del otro lado, “ver en el otro lo que nosotros tenemos que aprender para comunicarles nuestra experiencia de fe”. En ese punto, instó a tener “una actitud empática, que acoja al otro”.

 

Para reflexionar sobre el tercer verbo del lema, “custodiar”, se hizo presente mediante un video el arzobispo de Buenos Aires cardenal Mario Aurelio Poli.

En primer lugar, el purpurado repasó la misión de los catequistas en 2020, y destacó sus esfuerzos y su creatividad “para no perder a los chicos y chicas, a los adolescentes, a los niños”, y mencionó a quienes “estuvieron presentes y poniendo el hombro junto a los miembros de la comunidad” con la entrega de viandas y alimentos. 

Seguidamente, se refirió a algunas cosas “tradicionales” y a otras del magisterio del papa Francisco, quien “siempre tiene a la catequesis como la reina de la evangelización”.

En ese sentido, consideró que “la catequesis es una siembra artesanal, persona a persona, en pequeños grupos, es la transmisión de las cosas de Dios que ustedes saben dar a través de sus encuentros. Son los artesanos del Evangelio y de las cosas de Dios”. La tarea del catequista, destacó, es la de “impregnar la vida entera”. Nuestro tiempo “necesita de la catequesis y su proyección social”. 

Si bien reconoció que en la Iglesia “tenemos otros medios para transmitir la fe”, el cardenal Poli advirtió que “la catequesis está en la base, es como el cimiento de la Evangelización”. Finalmente, agradeció “porque se dice que el obispo es el catequista de la diócesis, pero qué haría sin ustedes… Ustedes son como las manos extendidas del obispo”, afirmó.