INTERCAMBIO DE BUENAS PRÁCTICAS

Luego de la bienvenida a los casi 1.000 docentes y de la armoniosa animación musical, la Apertura del Foro estuvo a cargo del padre Pablo Corbillón, vicario para la Pastoral de Educación del arzobispado porteño: “Necesitamos compartir mucho y escuchar mucho. Que tengamos un buen día de trabajo”. 

 

 

Por su parte, el cardenal primado de la Argentina y arzobispo de Buenos Aires Mario Aurelio Poli compartió una reflexión sobre el Evangelio (Primera carta de san Juan) y, posteriormente, entregó junto al padre Gastón Lorenzo y el propio Corbillón el Documento Preliminar del Sínodo Arquidiocesano porteño a los rectores de colegios secundarios presentes en el amplio gimnasio del Colegio Manuel Belgrano. También se rezó la Oración del Sínodo y el cardenal Poli impartió una bendición a todos los presentes.

Punteamos algunos de los principales aspectos de la reflexión de cardenal Poli:

• “Se trata de la enseñanza de Jesús sobre el amor”.

• “La educación que la Iglesia quiere dar a los niños y los jóvenes no puede darse sin amor.”

• “El papa Francisco en una reciente carta, ‘Vive Cristo’, fruto del Sínodo sobre los Jóvenes de año pasado, en un momento dado nos dice que todo cristiano y toda cristiana tienen que saber algunas verdades de nuestra fe: Dios nos ama, Cristo nos salva, Él está vivo. Yo me voy a referir a la primera verdad iluminados por este texto de san Juan, que ha definido a Dios por la vía del amor. Dios es amor, nos dice san Juan. Y el que ama ha visto a Dios. Y Dios permanece en el que ama. Estas verdades tienen que prender en el corazón de cada uno de los docentes.”

• “No se me ocurre que pueda haber docencia sin amor.”

• “Si el cristiano a lo que hace le agrega el amor siempre da frutos.”

•  “El Padre te sostendrá con firmeza y respetará tu libertad.”

• “Muchos jóvenes y no tan jóvenes tatúan su cuerpo. Es cultura de nuestro tiempo. Dios, para no olvidarse de nosotros, se tatuó nuestro nombre para tenernos presentes. Eso lo dice el profeta Isaías: ‘Te llevo tatuado en la palma de mis manos’. Dios inventó el tatuaje.”

• “Desde antes que existiéramos éramos un proyecto del amor de Dios.”

• “A Dios no le molesta que le expreses tus cuestionamientos (…) le preguntamos ‘¿por qué?’. (…) Lo que le preocupa a Dios es que no le hables.”

• “Queridos amigos y amigas docentes: ¿puede educarse sin amor, sin dar a conocer este infinito amor de Padre para todos? Me animo a decir que es el centro de la educación católica.”

• “Que en esta Jornada puedan convertirse y convertirnos todos y ser testigos del amor de Dios a través de la Educación.”