Por Salvatore Cernuzio

Hoy el encuentro con el Patriarca Kirill, con la Comisaria para los Derechos de los niños, con la comunidad católica local, y finalmente la Misa en la Catedral dedicada a la Madre de Dios; ayer el encuentro con el consejero de Putin para la política exterior y con los obispos católicos en la Nunciatura.  Para el cardenal Matteo Maria Zuppi, enviado del Papa a Rusia los días 28 y 29 de junio para encontrar "caminos para una paz justa" son dos días de encuentros y citas en Moscú. Se trata de la segunda etapa de la misión del presidente de la CEI, tras la realizada en Kiev los pasados 5 y 6 de junio, durante la cual rezó por todas las víctimas de la masacre de Bucha y se entrevistó con el presidente Volodymir Zelensky. En Moscú, ayer, el cardenal fue recibido por Yuri Ushakov, consejero para asuntos de política exterior del Presidente Vladimir Putin, de 76 años, embajador en Estados Unidos de 1998 a 2008.

Palabras del Nuncio

"Como saben, la misión que el Santo Padre Francisco ha confiado al cardenal Zuppi es la de identificar y alentar iniciativas humanitarias que permitan iniciar un camino que, esperamos, conduzca a la tan deseada paz", ha afirmado el nuncio en Moscú, monseñor Giovanni D'Aniello, hablando esta mañana a algunos periodistas a los que ha confirmado el programa de hoy. En primer lugar, el encuentro de esta mañana con Marija L'vova-Belova, Comisaria para los Derechos de los niños. La atención se centra en la cuestión de los más de 19.000 menores ucranianos deportados a Rusia, una cuestión para la que el Presidente Zelensky había pedido la ayuda de la Santa Sede en su audiencia de mayo con el Papa Francisco. Al final de la misión del cardenal Zuppi, se podrían "asistir a gestos concretos como un nuevo intercambio de prisioneros o el anuncio de iniciativas para apoyar a los numerosos refugiados y prófugos que este conflicto está provocando", dijo ayer en una entrevista a Vatican News monseñor Paolo Pezzi, arzobispo metropolitano de la arquidiócesis de la Madre de Dios en Moscú.

El encuentro con Kirill

En la misma entrevista, monseñor Pezzi anticipó la posibilidad de un encuentro entre Zuppi y el Patriarca ortodoxo Kirill: "Si así fuera, sería una ocasión realmente importante", dijo. Por tanto, está confirmado que el encuentro tendrá lugar esta tarde, según D'Aniello, así como la solemne concelebración eucarística de esta tarde en la catedral dedicada a la Madre de Dios, obispado de la arquidiócesis metropolitana de la Madre de Dios en Moscú. La Misa ya había sido anunciada ayer. Al final de la misa, Zuppi se reunirá con la comunidad católica, "a la que transmitirá los saludos, la cercanía y las oraciones del Santo Padre". Por último, mañana 30 de junio, a primera hora de la tarde, el cardenal regresará a Roma.

El primer día en oración y en coloquio con el consejero de Putin

La primera jornada del cardenal en Rusia se abrió ayer con una oración, arrodillado ante un icono mariano. Es la única imagen que hasta ahora ha llegado de Moscú procedente de la misión del cardenal. Se trata de la efigie de la Madre de Dios de Vladimir, conocida como la Virgen de la Ternura, el icono mariano más antiguo de Rusia, conservado en la Galería Tretyakov, no lejos del Kremlin. Inmediatamente después, Zuppi fue a entrevistarse con el consejero Ushakov. Fue una larga conversación en la que se abordó el conflicto en Ucrania y "las posibles vías para una solución política y diplomática". Así lo informaron ayer las agencias rusas, entre ellas Interfax, que también reportó el comentario del portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, en un punto de prensa a última hora de la mañana de ayer tras la reunión Zuppi-Ushakov: "En general, ya hemos declarado en varias ocasiones que apreciamos mucho los esfuerzos y las iniciativas del Vaticano para encontrar una solución pacífica a la crisis, y acogemos con satisfacción esta voluntad del Papa de contribuir a poner fin al conflicto armado en Ucrania", dijo. El cardenal Zuppi se reunió por la tarde con los obispos católicos de Rusia en el edificio de la Nunciatura.