El Papa León XIV: “El amor no es fruto del azar, sino de una elección consciente”

El Papa León XIV: “El amor no es fruto del azar, sino de una elección consciente”

El Papa León XIV enfatizó este miércoles que el amor “no es fruto del azar, sino de una elección consciente” y dejó claro que no se trata de una “simple reacción”, sino de una “decisión que requiere preparación”.

 

Por Victoria Cardiel

El Santo Padre arrancó desde la plaza de San Pedro un nuevo ciclo de catequesis sobre el misterio de la pasión, muerte y resurrección de Cristo. En este marco, destacó que Jesús no afronta su pasión “por fatalidad”, sino “por fidelidad a un camino acogido y recorrido con libertad y cuidado”.

 

Para el Pontífice, esto resulta un verdadero consuelo: “Saber que el don de su vida nace de una intención profunda, no de un impulso repentino”.

En este contexto , propuso meditar sobre el sentido profundo de la palabra “preparar” que, si bien a primera vista parece sencilla, custodia en realidad “un secreto precioso de la vida cristiana”.

Para explicarlo, el Pontífice — que volverá a la localidad de Castel Gandolfo del 15 al 17 de agosto  — analizó el pasaje del Evangelio de San Marcos, en el que los discípulos preguntan a Jesús dónde quiere que preparen la cena de Pascua el primer día de la fiesta de los panes ácimos.

La respuesta de Jesús parece casi un enigma: “Vayan a la ciudad; allí se encontrarán con un hombre que lleva un cántaro de agua”.

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En esta narración, explicó el Papa, los detalles se vuelven simbólicos: “Un hombre que lleva un cántaro —gesto habitualmente femenino en aquella época—, una sala en el piso superior ya preparada, un dueño de lacasa desconocido”.

A partir de esta imagen, el Pontífice explicó que “incluso antes de que nos demos cuenta de que necesitamos acogida, el Señor ya ha preparado para nosotros un espacio donde reconocernos y sentirnos sus amigos”. 

Ese espacio, añadió, “es, en el fondo, nuestro corazón: una ‘sala’ que puede parecer vacía, pero que sólo espera ser reconocida, llenada y custodiada”.

“La Pascua, que los discípulos deben preparar, está en realidad ya preparada en el corazón de Jesús”, afirmó el Papa.

El Papa saluda a los peregrinos presentes en la Audiencia General. Crédito: Daniel Ibañez/ EWTN News“El don de Dios no anula nuestra responsabilidad”

Así señaló que “la gracia no elimina nuestra libertad, sino que la despierta”.“El don de Dios no anula nuestra responsabilidad, sino que la hace fecunda”, añadió. 

El Santo Padre indicó también que “hoy, como entonces, hay una cena que preparar. No se trata sólo de la liturgia, sino de nuestra disponibilidad a entrar en un gesto que nos supera”. 

La Eucaristía se celebra en la vida cotidiana 

En este sentido, explicó que “la Eucaristía no se celebra sólo en el altar, sino también en la vida cotidiana, donde es posible vivir todo como ofrenda y acción de gracias”.

“Prepararse para celebrar esta acción de gracias no significa hacer más, sino dejar espacio. Significa quitar lo que estorba, rebajar las pretensiones, dejar de cultivar expectativas irreales”, dijo el Papa. Y advirtió: “Con demasiada frecuencia, de hecho, confundimos los preparativos con las ilusiones. Las ilusiones nos distraen, los preparativos nos orientan. Las ilusiones buscan un resultado, los preparativos hacen posible un encuentro”.

“El amor verdadero —nos recuerda el Evangelio— se da incluso antes de ser correspondido. Es un don anticipado. No se basa en lo que recibe, sino en lo que desea ofrecer. Es lo que Jesús vivió con los suyos: mientras ellos aún no entendían, mientras uno estaba a punto de traicionarlo y otro de renegar de él, Él preparaba una cena de comunión para todos”.

Por ello, el Pontífice instó a los fieles a “preparar la Pascua del Señor. No sólo la litúrgica, sino también la de nuestra vida”. 

Y detalló: “Cada gesto de disponibilidad, cada acto gratuito, cada perdón ofrecido por adelantado, cada esfuerzo aceptado con paciencia es una forma de preparar un lugar donde Dios puede habitar”.

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