La fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) invita a sumarse a la campaña “Un Millón de Niños Rezando el Rosario” que se realizará este domingo 18 de octubre a las 9 de la mañana en todo el mundo para pedir paz y unidad, y especialmente por las consecuencias de la pandemia de coronavirus.

El argentino Francisco Alday, Licenciado en Medios Audiovisuales de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y productor del video de animación de este evento, contó a Cadena 3: “Desde el pequeño pueblo de Königstein (Alemania), sede de la fundación, se invita a unir a todos los niños en una misma sintonía, a conectarse espiritualmente rezando el Rosario el mismo día y a la misma hora, para que hagamos un clamor más fuerte”.

“La idea de la campaña surgió en 2005 en Caracas (Venezuela), cuando varios chicos rezaban el Rosario y las mujeres que estaban allí recordaron las palabras del Padre Pío: ‘Si un millón de niños rezara el Rosario, el mundo cambiaría”, indicó.

A partir de entonces el proyecto alcanzó una dimensión global: “El trabajo de la fundación es ayudar la iglesia que sufre en todo el mundo, y tenemos la experiencia de cuán importante es la oración porque sólo Dios puede traernos la verdadera y profunda paz”.

De Catamarca al mundo

“Me pidieron producir el video de animación para esta campaña, con mi familia vivimos en Alemania hace varios años, pero en marzo viajamos a Catamarca y fue justo el momento en que se cancelaron los vuelos por la pandemia”, relató.

Y describió: “En ese tiempo hicimos la animación y fue muy especial porque la realizamos con mucha sencillez, con una computadora muy pequeña, con la voz de mis hijas, en una casita en medio de las montañas”.

“Ahora el video está traducido a más de siete idiomas, salió en una cadena de noticias junto a una invitación del papa Francisco a sumarse a la campaña y me emocionó escuchar la voz de mis hijas”, expresó.

Y agregó: “Creo que es muy simbólico en este tiempo en que aumentan los casos y se nos pide estar separados, que podamos acercar los corazones y darnos la mano de manera virtual”.

Qué no haría un padre por sus hijos

“Tengo dos niñas muy pequeñas y cuando ellas me piden algo con lo que puedo y como puedo trato de dárselos, imaginen que, si un millón de chicos pidiera lo mismo al mismo tiempo, no habría padre que se resistiera; seguramente nuestro padre del cielo está escuchando el corazón de sus hijos y particularmente el de los más pequeños”, argumentó.

Y destacó: “La convocatoria es para todos, este domingo a las 9 de la mañana en el lugar que se encuentren. Es simbólico, porque es decirles a los chicos que ahí donde están y con gestos muy pequeños pueden cambiar el mundo”.

En la página web de la fundación hay muchos recursos para acompañar la campaña, e incluso cada uno de los que esté orando puede registrarse y marcarlo en un mapa. “También está la posibilidad de compartir fotos y videos con niños que en ese momento estarán haciendo lo mismo: construyendo un mundo mejor”, cerró Alday.

 

Informe de Débora Loza.