En un texto titulado “El sacerdote José Carlos Tuárez Zambrano: Jesús te pide que vuelvas”, el P. Fortea expresó que le produjo una pena muy grande “conocer la noticia de un sacerdote que en Ecuador se ha dedicado a cosas mundanas, abandonando su santa profesión que le consagraba a las cosas del Reino de Dios”.

“No le juzgo, porque para ello debería conocer su historia y su alma como las conoce Dios. Pero, objetivamente, el sacerdote de Dios no desea otra cosa que vivir en la Casa del Señor todos los días de mi vida”, señaló.

El P. José Carlos Tuárez Zambrano se postuló a fines de 2018 a la presidencia del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, considerado como el “quinto poder del Estado” en Ecuador.

Tuárez Zambrano resultó ganador del proceso electoral en marzo del 2019, y asumió el cargo en junio de este año.

La Orden de Predicadores (dominicos), a la que pertenece Tuárez Zambrano, señaló en un comunicado en marzo de este año que el nuevo Presidente del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social se encuentra en “desobediencia” y no tiene permiso para ejercer el ministerio sacerdotal.

Según recoge el diario ecuatoriano El Universo, el 17 de junio el P. José Barranco, director de Radio Católica, medio de comunicación de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, señaló que Tuárez Zambrano “conforme a las normas vigentes de la iglesia, mientras ejerza una actividad pública o política tiene prohibido realizar el ministerio sacerdotal, como también el uso del hábito religioso”.

El P. Fortea aseguró en su texto que “yo, con el salmo (27,4) solo le pido una cosa al Señor. Puedo tener y tengo muchos defectos, pero solo busco, ansío y ambiciono una cosa: poder servir al altar hasta que me muera, poder administrar los misterios de Dios, poder predicar su Palabra”.

“El resto de cosas son el campo de los laicos”, señaló.

El sacerdote español precisó que “por supuesto que mi trabajo incluye la caridad como consecuencia de lo primero, pero nunca metiéndome en política”.

Sin embargo, alentó a no criticar a Tuárez Zambrano, y pidió que “recemos por él”.

“Ojalá que recapacite y, ante todos, sea un ejemplo de conversión. Y que diga: ‘ante todos me equivoqué, delante de todos lo reconozco y hago penitencia’. Ojalá que este sea el final de esta historia”.

“¡Con lo grande que es el sacerdocio!, ¿dejarlo por un cargo político? Qué error”, finalizó.