El obispo Hugo Santiago presidió la primera misa por los 40 años del acontecimiento mariano. "El mundo cambiará atraído por la belleza de Dios que resplandece en el corazón de María", destacó.
Una multitud de fieles llegó a la ciudad bonaerense de San Nicolás para pedir y agradecerle a la Virgen del Rosario, en el marco de los 40 años del acontecimiento mariano que se celebran hoy con el lema “Gracias Madre por entregarnos tu corazón en esta tierra bendita”.
Tras la vigilia de oración y la llegada de la imagen de san Cayetano y de san Nicolás de Bari, patronos de la ciudad y de la diócesis, el obispo de San Nicolás, monseñor Hugo Santiago, presidió la misa que dio inicio a una jornada de celebración.
“En este nuevo cumpleaños, celebramos la belleza atrayente del corazón de María, porque es la belleza de Dios que, no sin su ‘hágase’ mediante, se hizo carne en Ella. Por eso nos muestra el camino diciéndonos: ‘hijitos’, díganle ‘no’ a la falsa atracción y a la fealdad de la violencia, el individualismo, las falsas promesas, la indiferencia, la insensibilidad, el activismo, la vanidad y el autocuidado”, señaló en la homilía.
“Cultiven más bien la belleza personal que es la más valiosa y la que dura en el tiempo; cambien la fealdad de la violencia en la mirada por la belleza de una mirada de ternura que se compadece y acaricia. Díganle ‘sí’ a la atracción de la belleza de Dios en Cristo”, sostuvo.
El obispo aseguró que María alienta a cambiar este “mundo feo” y dice: “Tienen la gracia del bautismo que es la misma gracia de Dios que yo tuve: díganle ‘sí’, como yo, díganle ‘hágase en mí’ a la voluntad de Dios que los invita a la cordialidad, el buen trato, la verdad, la empatía, la compasión acompañada con el gesto de ternura, serán bellas personas y pondrán belleza, verdad y amor en las relaciones interpersonales. Harán un mundo más bello”.
“Que una nueva estética salvará al mundo, significa que el mundo cambiará atraído por la belleza de Dios que resplandece en el Rostro y el Corazón de María. Feliz cumpleaños, María. ¡Viva nuestra Reina del Cielo! ¡Viva nuestra Madre!”, concluyó.
Comentá la nota