El pueblo de Santiago se prepara para peregrinar a Mama Antula

El pueblo de Santiago se prepara para peregrinar a Mama Antula

“La peregrinación: experiencia sacramental del pueblo sencillo de Dios”, así define el padre Ramón Tenti la procesión religiosa.

“Las peregrinaciones a diversos santuarios forman parte de la experiencia religiosa del pueblo de Dios. En Santiago del Estero se realizan varias durante el año: al Santuario de Mailín, de San Esteban y San Gil, a la Virgen de Huachana y del Valle de Catamarca y al santuario de Mama Antula, en Silípica, conformando un estilo de religiosidad popular más en sintonía con el peregrinar en la fe del pueblo de Dios en la historia que con expresiones litúrgicas ligadas a la sacramentalidad institucional de la Iglesia”, expresa el padre Mario Ramón Tenti, en el marco de la preparación para la peregrinación por María Antonia, de sábado 27 de agosto.

Se trata de la quinta edición de la peregrinación, que partirá desde el colegio Juan Pablo II, del barrio Almirante Brown, hacia Villa Silípica, recorriendo distintas localidades del Camino Real.

“Peregrinar al santuario de Mama Antula recrea el caminar del pueblo de Dios a la “patria celestial” y el caminar de esta mujer extraordinaria que ha recorrido miles de kilómetros con el único fin de que Dios sea conocido y amado.

En la fe, sentimos que Mama Antula nos acompaña, con su cruz como bastón y su capa negra, a pie descalzo, ayudándonos a sortear los obstáculos del camino, que simbolizan las dificultades propias de la vida: “la providencia del Señor hará llanos los caminos que a simple vista parecen insuperables”.

Junto a ella experimentamos las primicias de la salvación que Cristo ha traído al mundo; con ella, cantamos la alabanza de sentirnos amados por Dios e invitados a ser parte de su Reino. ¿Acaso puedes dejar pasar esta oportunidad de peregrinar al Santuario de Mama Antula y sentirte parte del pueblo de Dios que camina en la historia? Escucha el llamado de Dios y únete para vivir y ser testigo de esta experiencia de fe inigualable. “Dios está a la puerta y te llama” (Apoc 3, 20)”-, cita el padre Tenti.

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