Mons. Lozano alentó a colaborar con la “casa amigable” para recuperar adictos

Mons. Lozano alentó a colaborar con la “casa amigable” para recuperar adictos

 El obispo de Gualeguaychú, monseñor Jorge Lozano, destacó que el gesto cuaresmal diocesano buscará “estar cerca de los hermanos que la están peleando para salir de la droga”, por lo que alentó a contribuir económicamente con lo que será la futura “casa amigable” de alojamiento para jóvenes en proceso de recuperación por adicciones. 

”El problema es de todos y la solución también”, aseguró y recordó que se están distribuyendo sobres para “colocar el dinero que ahorre con las privaciones de estos 40 días, y entregarlo como ofrenda el Jueves Santo¨.

El obispo de Gualeguaychú, monseñor Jorge Lozano, destacó que “durante la Cuaresma el ayuno y las privaciones tienen una finalidad solidaria. Buscan restaurar la justicia y promover la ayuda a los más necesitados, para que aquello que logremos ahorrar se destine al bien de los pobres y abandonados”. 

En este sentido, el prelado propuso que en las parroquias, capillas, comunidades educativas se promueva “un mismo gesto solidario, que nos ayude a estar cerca de los hermanos que la están peleando para salir de la droga”. 

“Francisco nos enseña que la misericordia de Dios no es una idea abstracta, sino una realidad concreta con la cual Él revela su amor, que es como el de un padre o una madre que se conmueven en lo más profundo de sus entrañas por el propio hijo. Vale decir que se trata realmente de un amor ‘visceral’”, recordó en su columna semanal. 

El obispo explicó que “buscando cómo hacer efectivo este llamado, desde el Consejo Pastoral y el Consejo Presbiteral de la diócesis proponemos, como gesto de este Año Jubilar, recaudar dinero en todas las comunidades para una obra de misericordia concreta: construir una ‘casa amigable’ de alojamiento para hermanos en proceso de recuperación por adicciones”. 

”El problema es de todos y la solución también”, aseguró. 

Tras citar palabras del pontífice en su reciente visita pastoral a México, afirmó que “es el mismo Francisco que nos sigue alentando para que no marginemos e incluyamos, con comprensión y ‘escuchaterapia’”. 

”Es necesario hacer el esfuerzo de acallar muchos ruidos que nos rodean y distraen. Es necesario escuchar el clamor de los pobres y hacernos cargo de la carne de Cristo que sufre en ellos. La ‘vida interior’ no nos lleva a vivir protegidos y encerrados como caracoles, sino en salida al encuentro de los hermanos”, sostuvo. 

El obispo gualeguaychense precisó que “la casa contará con 16 plazas que serán utilizadas por personas de todas las ciudades de nuestra diócesis. El espacio permitirá recibir y hospedar por un tiempo breve a hermanos con problemáticas vinculadas al consumo de drogas, mientras se discierne su “pequeño plan”, e indicó que “la casa amigable estará próxima al actual ‘centro barrial’ del Hogar de Cristo Nazareth, que funciona en el Barrio Franco (Gualeguaychú)”. 

Asimismo, destacó que para alentar la solidaridad se entregaron sobres donde cada familia podrá “colocar el dinero que ahorre con las privaciones de estos 40 días, y entregarlo como ofrenda el Jueves Santo. En casa, en el aula, en el barrio, la creatividad irá orientando la generosidad, y tal vez reemplacen el sobre por una cajita que, colocada en un lugar visible, nos recuerde que hay hermanos que esperan nuestro aporte”. 

Monseñor Lozano aclaró que “en el sobre no va lo que sobra sino aquello de lo cual podamos privarnos para que otros tengan lo necesario. Todos nos maravillamos de la vida y la obra de la Beata Teresa de Calcuta. Acojamos también su enseñanza de ‘dar hasta que duela y, cuando duela, dar todavía más’. Que se note tu amor por Jesús en el hermano”.+ 

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