El obispo-prelado de Humahuaca y presidente de la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas, monseñor Pedro Olmedo Rivero CMF, renovó el pedido de solidaridad para la próxima colecta Más por Menos, y así para compensar las desigualdades de la tarea de la Iglesia en regiones muy alejadas y con pocos recursos propios.
El obispo-prelado de Humahuaca y presidente de la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas, monseñor Pedro Olmedo Rivero CMF, renovó el pedido de solidaridad para la próxima colecta Más por Menos, y así para compensar las desigualdades de la tarea de la Iglesia en regiones muy alejadas y con pocos recursos propios.
La Colecta Más por Menos tendrá este año como lema “Demos más para que otros sufran menos” y se realizará en todas las parroquias y capillas del país el fin de semana del sábado 12 y el domingo 13 de septiembre.
En diálogo con AICA en la sede del episcopado, en Buenos Aires, monseñor Olmedo invitó a reconocer que en la Argentina persisten “regiones muy olvidadas, muy ocultas y con una pobreza estructural dura”, donde las condiciones geográficas y de lejanía dificultan el progreso de las poblaciones.
El obispo claretiano también indicó que mucha gente vive aún en necesidad imperiosa, sin fuentes de trabajo y a cuenta de programas sociales que “se van haciendo una manera permanente de vida”, lo cual “no es bueno”. También recordó que la ayuda recibida en parroquias, capillas y colegios, además de las transferencias, se destina en partes iguales a la evangelización directa y a la promoción social de las comunidades vulnerables.
¿En qué contexto llega esta colecta?
- Hemos querido volver a los orígenes de esta colecta, a su fundación, que estuvo a cargo de monseñor Jorge Gottau CSsR, y está marcando el sentido de esta edición. El escenario de país que tenemos muestra regiones muy olvidadas, muy ocultas, y una pobreza estructural dura, con condiciones de alejamiento que hacen difícil acceder a muchas cosas.
¿Cuáles son las necesidades más imperiosas de las regiones necesitadas?
- Como necesidad imperiosa, las fuentes de trabajo. Hay programas sociales, pero se está haciendo una manera permanente de vida, que no es bueno. Mucha gente migró frente a las economías de subsistencia que se encuentran. Algunos van a hacer ‘temporaditas’, a cosechar, pero no hay fuentes genuinas de trabajo.
También hay que resolver la tenencia de las tierras, y falta perspectiva para la gente joven, aunque ha mejorado mucho la presencia de escuelas secundarias. Pero fuera de esto, los jóvenes se encuentran con un paredón ahí nomás, y es muy difícil que puedan seguir estudiando. También se han globalizado otros problemas, como el consumo de drogas y la violencia.
¿Y en su diócesis? ¿Qué hace falta?
- La prelatura lleva casi 49 años. Desde su creación, la Iglesia ha promovido todo lo que sea evangelización directa y promoción social. Ayudamos a las organizaciones sociales y seguimos impulsando programas de asistencia, proyectos de agua potable, luz eléctrica a través de paneles solares, y también tenemos ayudas para chicos y madres en salas infantiles. Hay muchos catequistas, animadores y laicos participando. Pero sentimos impotencia por la falta de clero.
¿Hace falta mayor animación en las diócesis, en las parroquias, en las capillas y colegios?
- Cuando se promueve más, se anima más… es tan grande el país y hay tantas cosas, pero yo creo que es importante recuperar el espíritu de monseñor Gottau, que buscaba que las diócesis más ricas compartan la responsabilidad en la tarea evangelizadora con las diócesis mas pobres. En cuanto a recursos, esta colecta es un oxígeno muy grande para poder llevar adelante la evangelización.
¿Qué le pediría usted a cada argentino con posibilidades de ayudar?
- Este es un espacio fiable de la Conferencia Episcopal Argentina para compensar las desigualdades de la tarea de la Iglesia en regiones muy alejadas y con pocos recursos propios. Les pido que sean generosos: no solo ayudan la evangelización directa. La mitad es para acciones de promoción humana, el sostén de hogares de ancianos, albergues de chicas y chicos, puestos sanitarios, y demás. Así iremos mejorando.
Cómo colaborar todo el año
La Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones más Necesitadas recibe donaciones todo el año. Se reciben donativos mediante depósito o transferencia bancaria (cuenta corriente Nro. 00013892/9, del Banco Santander Río, casa central, CUIT 30-51731290-4; CBU 0720000720000001389290), o a través de tarjetas de crédito Visa, Mastercard, American Express y Diners.
También en cualquier sucursal de la red Pago Fácil, con la sola presentación del DNI, mucha gente que no va a la Iglesia y tantos otros hombres de buena voluntad que quieran ayudar. Informes: (011) 4394-2065, [email protected] o en la página web
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