Jóvenes de la Legión de María de Goya misionaron en bicicleta por zonas afectadas por la inundación

Jóvenes de la Legión de María de Goya misionaron en bicicleta por zonas afectadas por la inundación

Veinte jóvenes de la Legión de María de la diócesis de Goya misionaron en zonas del paraje Carumbé y de Santa Catalina, en el camino al Puerto Boca, desde el 18 al 23 de enero. Los misioneros residían en la casa de formación Ñanderoga, y desde allí salían en bicicletas hacia las zonas de misión.

El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, presidió la misa de clausura de la misión realizada por la curia juvenil de la Legión de María que se desarrolló desde el 18 al 23 de enero en zonas del paraje Carumbé y de Santa Catalina, en el camino al Puerto Boca. Los jóvenes legionarios residían en la casa de formación Ñanderoga y desde allí salían en bicicletas hacia las zonas de misión. 

Alrededor de veinte jóvenes visitaron durante una semana las casillas de las personas auto evacuadas por las inundaciones y viviendas del Carumbé y del barrio Santa Catalina acompañados por el párroco del lugar, el padre Enrique Domínguez C.Ss.R de la congregación del Santísimo Redentor. 

Los misioneros se alojaron en la casa de formación Ñanderoga ubicada en San Martín 442, en el centro de la ciudad. Todos los días, después de la oración de la mañana misionaban hasta el mediodía y por la tarde participaban de talleres de formación que estuvieron a cargo de los sacerdotes Rodolfo Gerardo Barboza y Enríque Domínguez. 

Un día de la misión la dedicaron especialmente a los niños, y durante esa jornada, que denominaron “la misioncita”, realizaron actividades de recreación y de catequesis que culminaron con una misa en el paraje Carumbé. 

Cada jornada de la misión culminaba con el rezo del rosario por las calles céntricas de Goya, con la imagen de la Santísima Virgen y con una celebración eucarística. 

Monseñor Canecín presidió la misa de clausura de la misión en la capilla de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, ubicada en cercanías del riacho Goya. Durante la celebración se escucharon algunos testimonios de los jóvenes misioneros y proyectaron un video con imágenes de las actividades cumplidas durante la misión. 

El obispo destacó la misión de los jóvenes que estaban "bastante quemaditos por el sol", y también le dio importancia al gesto de tener la Biblia "en sus manos, porque la Biblia es la carta de amor de Dios que no debe faltar en ninguna casa". 

"El hombre es coautor de las sagradas escrituras y el autor es Dios, porque Dios y el hombre se pusieron de acuerdo y se escribió la Biblia". El prelado afirmó que ‘a estos jóvenes les arde el corazón’ porque ‘llevaron la Palabra de Dios’, y a su vez recordó las expresiones de San Gerónimo, ‘el que conoce las Sagradas Escrituras conoce a Jesucristo, y el que ignora las Sagradas Escrituras ignora a Jesucristo’". 

"Jóvenes misioneros -dijo Canecín- la buena noticia que la Iglesia tiene para toda la humanidad se llama Jesucristo y Él es el rostro de la misericordia", señaló el obispo. 

En otra parte de su homilía destacó la expresión bíblica “como el Padre me envió, yo los envío a ustedes” y agregó que “estos jóvenes de la Legión de María que estuvieron misionando durante estos días se saben enviados por Dios y por la Iglesia”. 

Monseñor Canecín concluyó diciendo que "estos jóvenes invirtieron sus vacaciones escolares en ir en bicicleta desde el centro de la ciudad hacia las zonas periféricas y veo rostros cansados pero radiantes y felices por haber seguido a Jesús, por haber predicado con la Palabra de Dios, por haber anunciado a Jesús y a su Madre María".

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