“La Iglesia toma cosas positivas de la posmodernidad”

“La Iglesia toma cosas positivas de la posmodernidad”

Gianfranco Ravasi , el “ministro” de Cultura del papa Francisco considera “un valor” que la posmodernidad haya puesto en crisis los grandes sistemas ideológicos en defensa de la dignidad de las personas.

Con 11 libros e incontables artículos periodísticos publicados en diarios y revistas italianas, y la singular experiencia de protagonizar un ciclo de programas de TV, el cardenal Gianfranco Ravasi sabe dialogar con la cultura contemporánea desde la fe católica. Por ese motivo, es uno de los excolaboradores del papa emérito Benedicto XVI que Francisco ha mantenido en el “equipo” de cardenales que lo ayuda a gobernar la Iglesia.

Ravasi llegará hoy a Córdoba para ser, a su modo, la voz del Papa en el Atrio de los Gentiles, el evento internacional que propone la Iglesia para fomentar el diálogo cultural entre creyentes y no creyentes.

–¿La Iglesia propone un diálogo con los no creyentes para acercarlos a la fe?

–No. El elemento fundamental del anuncio cristiano es demostrar el valor de la fe en Jesucristo, que nosotros entendemos como el mejor camino para que la persona y el mundo sean mejores. Pero no lo hacemos para convencer, sino para presentar lo que creemos. Y, naturalmente, quienes no creen también nos muestran a nosotros su verdad, sus valores que pueden ser útiles a los mismos fines. Eso es dialogar.

– Pero a veces parece que la Iglesia no encuentra valores en la posmodernidad.

–Hay valores positivos de la posmodernidad que la Iglesia toma y reconoce. La posmodernidad, por ejemplo, ha invitado a eliminar o a poner en crisis los grandes sistemas ideológicos: el marxismo, el liberalismo, la teoría capitalista... También ha puesto en crisis a las religiones, pero lo ha hecho poniendo por encima de los sistemas ideológicos la cuestión de la persona. Y eso es positivo porque retornar a la persona, a la dignidad de la persona, a los valores de la libertad, la vida, la justicia es muy bueno.

–¿Y un antivalor de la posmodernidad?

–Podemos mencionar que de la absolutización del sujeto, del subjetivismo, se ha dado origen progresivamente a la negación de la idea, y esto, a su vez, ha dado origen a la indiferencia, a la superficialidad; se vive sólo para lo inmediato, no se reconocen valores objetivos, todo puede ser creado según los intereses del momento. Zygmunt Bauman habla de ello en La modernidad líquida .

–El mensaje de cercanía, sencillez y austeridad del papa Francisco, ¿ha cambiado en algo el diálogo de la Iglesia con la cultura?

–La figura del papa Francisco ha sabido llegar no sólo a los creyentes, sino a todas las personas, porque ha sabido retornar a la raíz de las preguntas de todas las personas: el sufrimiento, la soledad.

–Aquí en Córdoba usted hablará sobre la obra de Jorge Luis Borges. ¿La conoció por Bergoglio?

–Conozco la obra de Borges desde mi juventud. Pero apenas asumió el papa Francisco me dijo que conocía a María Kodama y facilitó un diálogo. Además, me contó que conoció a Borges, me regaló una foto de su encuentro con él, una nueva edición de la obra completa y un libro. En toda la obra borgeana está la búsqueda de religiosidad, misterio y trascendencia.

El programa de hoy

A las 15. Doctorado honoris causa a Stefano Zamagni, italiano experto en economía social. Salón de Grados de la UNC.

A las 17. Doctorados honoris causa al Cardenal Ravasi y al economista y sociólogo Bernardo Kliksberg. Auditorio Diego de Torres de la UCC.

A las 19. Conferencia: “Desafíos económicos para el bien común”. Obispo Trejo 242.

A las 19.30. Conferencia: “Borges y la trascendencia”. Obispo Trejo 323.

A las 21. Concierto de cierre. En el Cabildo Histórico.

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