La Iglesia llamó a reconstruir el diálogo

Dio a conocer un documento con motivo de la Navidad

La Iglesia anhela que la celebración de la Navidad sea aprovechado por los argentinos para recrear un clima de mayor concordia luego de las tensiones que provocó este año la larga campaña electoral y las divisiones que provocó el espíritu de confrontación que el gobierno saliente ejerció con fruición.

Lo expresaron los obispos con su característico modo mesurado, en una declaración que difundieron ayer, al término de la última reunión del año de la cúpula del Episcopado, ocasión en la que abogaron para que la evocación del nacimiento de Jesús sane "los vínculos lastimados".

Paralelamente, se informó que las máximas autoridades eclesiásticas, encabezadas por el presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, le realizarán hoy, a las 11, en la Casa Rosada, una visita al presidente Mauricio Macri, para presentarle sus saludos.

Arancedo había anticipado la semana pasada, durante uno de los actos por la asunción de Macri, que en el primer encuentro que los obispos tuvieran con el nuevo presidente, le pedirían que el combate al narcotráfico forme parte de "la mesa política" nacional de debate.

Además, trascendió que le entregarán al presidente los últimos documentos de la Iglesia, en los que abogan por el diálogo, la búsqueda de consensos, la lucha contra la pobreza y la independencia de poderes de cara al Bicentenario de la independencia nacional, que se celebrará el año que viene.

En la declaración de ayer, de sólo cuatro párrafos, titulada "mensaje de Navidad", los obispos dicen que "celebrar la Navidad nos compromete a la fraternidad y a practicar las obras de misericordia".

"Pedimos que la gracia del pesebre se derrame abundante en nuestras familias, sane los vínculos lastimados, traiga amor y alegría en todos los hogares, y brinde consuelo a los enfermos, a los presos y a los que están solos", señalan.

En ese sentido, dicen que "en el Hijo de María podemos contemplar la reconciliación definitiva entre Dios y el hombre, que ya no se separan ni se confunden. Navidad nos habla de nuestra dignidad. Se hizo hombre para que los hombres llegáramos a ser hijos de Dios y viviéramos como hermanos".

"En este Año Santo de la Misericordia debemos entender que el hombre sólo posee aquello que entrega a Dios y a los demás. Esa es su principal riqueza, y esto es lo que nuestra sociedad más necesita: que aprendamos a ser islas de misericordia en el mar de la indiferencia (Papa Francisco)", puntualizan.

El Episcopado recordó que "Navidad es Jesús", por lo que advirtió que "si él está ausente, la fiesta se vacía de sentido", y por eso considera que "el regalo que debemos intercambiar es, ante todo, él mismo". Y destacó que Jesús "es la misericordia de Dios hecha carne".

La Conferencia Episcopal Argentina saludó a Macri apenas resultó ganador, mediante una carta en la que pidió a Dios que ilumine y fortalezca al nuevo mandatario "en la delicada misión" de promover el desarrollo integral de todos los ciudadanos, en particular de "los más débiles".

Además, la Iglesia viene advirtiendo desde noviembre de 2013 sobre el avance "sin control" del narcodelito en el país

 

Comentá la nota