Es uno de los primeros templos que se edifican en Cuba en casi 60 años. Posibilitará que católicos del lugar dejen de celebrar misas y cultos en casas de familia.
Los católicos del barrio Antonio Guiteras, conocido también como "reparto Bahía", a unos seis kilómetros del centro de la ciudad, se reunían desde hace 21 años en casas de vecinos. En el área del nuevo templo en construcción, en un terreno cedido por el Estado, ya se levanta una edificación auxiliar, que funcionará junto a la iglesia propiamente dicha. "Aún falta el techo. Cuando la terminemos, ya podremos ofrecer en ella, por ejemplo, desayunos a vecinos y otras atenciones sociales, que ahora hacemos en casas familiares", explicó a el diácono Manuel Hernández, que atiende la comunidad.
El religioso recordó que debido a larga "situación" de tensiones entre el gobierno y la Iglesia Católica durante tres décadas, tras el triunfo de la revolución en 1959, no se construyeron templos de esa fe en Cuba. Los proyectos de edificación de ese tempo y de otros dos fueron recientemente aprobados por el Estado como resultado de la mejora de esas relaciones, proceso que cobró impulso con la visita pastoral a la isla de Juan Pablo IIen 1998. En 2012 el Papa Benedicto XVI fue el segundo Pontífice en ir a ese país, mientras el Papa Francisco tiene previsto visitar La Habana entre el 19 y el 22 del próximo septiembre.
"La Iglesia cubana ha debido costear con sus fondos esta obra, que esperamos esté en funciones pronto", destacó el diacono Hernández. El Arzobispo de La Habana, el cardenal Jaime Ortega, colocó la primera piedra de esa iglesia, dedicada a San Juan Pablo II, en una ceremonia el 14 de marzo pasado. Se utilizan por otra parte en su construcción las estructuras del altar donde Benedicto celebró la misa en su visita a La Habana de hace tres años. Según explicaron fuentes eclesiásticas, la piedra de mármol tiene inscrito el lema episcopal de San Juan Pablo II "Totus Tuus", y proviene de la región italiana de Reggio Calabria.
La parroquia de la Sagrada Familia de Palmi, de esa región, está hermanada con la parroquia del barrio Guiteras. El Párroco de La Sagrada Familia de Palmi, Pascuale Pentimalli, asistió a la ceremonia.
En el contexto de ese programa de construcción de templos católicos hay, por otra parte, proyectos ya aprobados en Sandino, en la provincia occidental de Pinar del Río, y en Santiago de Cuba, en el extremo este del país, pero aún no han comenzado sus construcciones. Los tres proyectos se desarrollan en lugares o urbanizaciones creadas después de 1959 en las que nunca hubo templos. La iglesia del reparto Bahía, pese a su retraso, aparece como la más avanzada de los tres.
Vecinos del lugar conocen de la obra y su ubicación. Mireya, un ama de casa de la zona, dijo no ser "creyente", pero "respaldó" el funcionamiento del templo: "Ellos (los católicos) hacen cosas buenas, en beneficio social y ayudan a vecinos que lo necesitan", explicó.
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