Carlos María Domínguez fue designado Obispo en San Rafael y tomará posesión de la Diócesis el 25 de marzo

Carlos María Domínguez fue designado Obispo en San Rafael y tomará posesión de la Diócesis el 25 de marzo

El 11 de febrero, el Papa Francisco nombró Obispo de San Rafael a monseñor Carlos María Domínguez, de 57 años, quien actualmente es obispo auxiliar de San Juan de Cuyo y administrador apostólico de San Rafael.

Según informó AICA (Agencia Informativa Católica Argentina), esto se dio a conocer tanto en Roma como en Buenos Aires, en el día de la Virgen de Lourdes, copatrona de la diócesis. Carlos María Domínguez será el octavo obispo diocesano. El ahora nuevo monseñor nació en San Martín, provincia de Buenos Aires, el 23 de diciembre de 1965. Fue ordenado sacerdote en la Orden de los Agustinos Recoletos el 13 de marzo de 1993 por monseñor Domingo Salvador Castagna, obispo de San Nicolás de los Arroyos.

El 5 de febrero de 2022, tras aceptar la renuncia de monseñor Eduardo María Taussig, el Papa Francisco lo nombró administrador apostólico de San Rafael.

«Ante la renuncia de un obispo, la Santa Sede designa durante este periodo que está vacante a una persona, con el fin de que pueda seguir llevando adelante la organización de la Diócesis. En estos casos se nombra a un administrador apostólico, y el año pasado el Papa Francisco me eligió a mí para realizar esa tarea», dijo monseñor Carlos Domínguez en una entrevista que brindó a Diario San Rafael y FM Vos 94.5.

«Ahora, el Papa me nombró Obispo de San Rafael, ya que vio como conveniente que continuara en mi función. Tengo la misma potestad que cuando cumplía funciones como administrador de la Diócesis, ya que el Santo Padre me había dado plenas facultades para administrar. Ahora como obispo continuaré por la misma senda, tomando las determinaciones que sean necesarias para el bien de la Iglesia», manifestó Domínguez.

«Fue el mismo Papa Francisco quien me llamó para darme la noticia en el mes de enero, aunque el nombramiento público se hizo el último sábado. Hablé varias veces telefónicamente con él. Incluso, el año pasado tuve la gracia de poder ser recibido en una audiencia privada. Estuvimos conversando más de una hora, en un diálogo muy cordial y fraterno», agregó.

«Francisco me agradeció por todo lo que había hecho en San Rafael durante el año pasado. Ser obispo de San Rafael significa una mayor estabilidad. Luego, con el nuncio, que es el embajador del Papa en Argentina, coordinamos la fecha de la publicación del nombramiento. Quise que fuera el 11 de febrero, que es el Día de la Virgen de Lourdes (patrona de la Diócesis). Es una fecha significativa para San Rafael y para mí, ya que un 11 de febrero de 1984 ingresé a estudiar al seminario religioso Agustino Recoleto», precisó el obispo de San Rafael.

Por otra parte, contó cómo decidió tomar el camino de esta vocación de servir a Dios. «Cuando tenía 10 años comencé a ser monaguillo. A esa edad me llamaba mucho la atención de cómo los curas celebraban la misa y ver a la gente desde el altar. Ahí creo que Dios puso su semillita en mi corazón, con el tiempo este llamado vocacional fue madurando. A medida de que fui creciendo, se fue afirmando esta fe. En el seminario Agustino Recoleto hice me formé durante seis años. El lunes 13 de marzo cumplo 30 años como sacerdote», subrayó Carlos María Domínguez.

«En el año 2006 fui elegido vicario provincial de la Orden en la Argentina, cargo que desempeñé hasta 2012. Además, fui elegido Vicario de la provincia Santo Tomás de Villanueva de la Orden de los Agustinos Recoletos, y presidente del Secretariado de Pastoral Juvenil y Vocacional, por lo que tuve que trasladarme a la comunidad de Guadalajara (España). Después de tres años, me eligieron Prior Provincial de la Provincia Santo Tomás de Villanueva, con sede en Madrid. Fui el primer provincial no español desde el año 1621, que fue cuando se fundó. Una vez que cumplí mi mandato, fui nombrado obispo titular de Vita y auxiliar de San Juan de Cuyo, el 22 de abril de 2019 por el Papa Francisco.», amplió.

«No fue fácil ser obispo en la época de pandemia, porque había que acompañar a los fieles y a los sacerdotes de una manera distinta. Estuve tres años allí, el 5 de febrero de 2022, tras la aceptación de la renuncia de monseñor Eduardo María Taussig como Obispo de San Rafael, me comunicaron la designación como Administrador Apostólico de San Rafael. Así que el año estuvimos repartiendo las labores entre San Rafael y San Juan», afirmó el padre Domínguez.

«Me siento realmente muy cómodo en San Rafael. Llegué con algunos temores, pero fui muy bien recibido. Tengo muchas expectativas y esperanzas sobre el futuro. Ya conocí a todos los sacerdotes y seminaristas. Visité las parroquias y capillas. Fue tanta la demanda parroquial, que no pude dedicarme a los laicos de la forma en la que hubiera querido. Ahora que estoy instalado acá, también voy a poder realizar la tarea de pastoreo hacia ellos», manifestó.

Al terminar la entrevista, se explayó sobre la cuestión de los temores y la realidad que debió afrontar en San Rafael en cuanto a algunos problemas internos que se desataron entre los fieles en torno a quien fuera monseñor de este departamento, Eduardo María Taussig. «Las redes sociales reflejaban una situación muy convulsionada. Yo miraba la situación desde afuera y me decía a mí mismo ‘Madre mía, a dónde voy’. Al final, cuando llegué, noté que el ambiente era diferente, hoy puedo decir que hay una Diócesis que está tranquila con sus problemas como cualquier otra. El 25 de marzo a las 18:30 horas en el atrio de la Catedral San Rafael Arcángel, tomaré posesión de la Diócesis de forma oficial. Están todos invitados a participar», concluyó Domínguez.

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