El cardenal Sandri presidió en Roma una misa por el 25 de mayo

El cardenal Sandri presidió en Roma una misa por el 25 de mayo

Comenzó con una ofrenda floral ante la estatua del general José de San Martín. Varios sacerdotes argentinos concelebraron la misa. Rezaron por las autoridades y por el pueblo argentino para luego invocar la protección de la Virgen de Luján.

El cardenal argentino Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales presidió este jueves 25 de mayo, una misa en la Iglesia Argentina en Roma para conmemorar la fiesta nacional. Con numeroso público y una importante presencia de diplomáticos, la jornada inició con la entrega de una ofrenda floral ante la estatua del general José de San Martín situado en Villa Borghese por los tres embajadores argentinos presentes en Roma. Tomás Ferrari, ante Italia, Roger Pfirter ante la Santa Sede y Claudio Rozencwaig ante la FAO.

La celebración eucarística fue concelebrada por varios sacerdotes argentinos entre ellos el rector del colegio sacerdotal argentino, padre Angel Hernández y el ceremoniero del Papa, monseñor Guillermo Karcher.

En su homilía, el cardenal Sandri, recordó que Cristo resucitado y viviente es el que “da sentido a nuestra historia y nuestra vida”. Y que delante de los vaivenes de fe a lo largo de los tiempos, “la presencia de Dios se siente” y en otros momentos en cambio “sentimos su ausencia”.

El prefecto de la Congregación para las Iglesia Orientales señaló que “en los tiempos difíciles”, de “pérdida de los valores cristianos” nuestra actitud “no tiene que ser como la de los discípulos que sienten que Cristo se alejó”, aseguró, sino que invocamos su protección y presencia.

“Nuestra acción de gracias es profunda y sincera”, señaló el cardenal Sandri, por todo lo que la Argentina recibió desde 1810.

Después de rezar por las autoridades y por el pueblo argentino el purpurado argentino concluyó invocando la maternal protección de “Santa María de Luján para que bendiga a nuestra patria y haz que vivamos el amor que nos trajo tu hijo Jesús”.

Concluida la Eucaristía, la conmemoración patria concluyó con un vino de honor en los salones del Colegio Argentino.

Comentá la nota