Mons. Hugo Santiago presidió la misa central por un nuevo aniversario del "acontecimiento mariano". Miles de peregrinos llegaron al santuario para pedir y agradecerle a la Virgen.
Miles de fieles acudieron este domingo al santuario de María del Rosario de San Nicolás en un nuevo aniversario del “acontecimiento mariano” en esta localidad bonaerense, donde el obispo local, monseñor Hugo Norberto Santiago, presidió la misa central en el “campito” aledaño a la basílica dedicada a la Virgen.
Hubo misas durante toda la jornada dedicada a la Virgen que este año llevó por lema “Madre tu presencia nos anima a caminar juntos”.
En la homilía, el prelado expresó: “En un mundo que genera niños huérfanos, por la disolución familiar o porque papá y mamá, con doble empleo no tienen tiempo para estar y dialogar con sus hijos, díganles que no hay nada más grande que dar a luz y formar a una persona humana, por eso me he dedicado a acompañar a mi Hijo desde Nazaret hasta la cruz; sean presencia, escucha y compañía de sus hijos, porque en eso consiste la paternidad y la maternidad; recuérdenles que en cada hijo hay un proyecto de Dios".
“En un mundo en el que las relaciones humanas se han puesto violentas y confrontativas, sean mensajeros de paz, busquen la unidad y la reconciliación de las personas, trátense con cordialidad y ternura; hagan la revolución de la ternura”, pidió, y agregó: “En un mundo donde la indiferencia se ha globalizado, vivan la percepción, que es el sentimiento que una madre tiene con su hijo, que sabe no solamente que llora sino que descubre también por qué llora y le da con exactitud lo que necesita”.
Monseñor Santiago animó a los peregrinos a ser “artífices de una ‘ecología humana’, humanicen la relación entre las personas, háganla cordial, desarrollen la capacidad de ponerse en el lugar del otro, integren a los más débiles y vulnerables, trabajen por el bien común, cuiden la creación, recen y enseñen a rezar al Padre del cielo, que quiere que hagamos un cielo nuevo y una tierra nueva”.
“María nos hace experimentar la alegría de ser familia y nos envía a integrar a muchos hermanos para que la fiesta sea mayor. ¡Viva la Virgen!”, exclamó.
Desde muy temprano y en los días previos, miles de devotos llegaron hasta San Nicolás para honrar, agradecer y pedirle a la Virgen de San Nicolás, que cada 25 -y especialmente en septiembre- moviliza multitud de devotos.
Monseñor Santiago presidió también la Eucaristía de la medianoche que abrió estas fiestas marianas en San Nicolás.
Comentá la nota