Además de la pandemia, América Latina sufre una grave crisis alimentaria

Además de la pandemia, América Latina sufre una grave crisis alimentaria

No sólo el Brasil y no sólo el coronavirus: hay varios países de la región de América Latina en profunda dificultad en una fase en la que la Oms indica esta parte del mundo como el nuevo epicentro de la pandemia y en la que el país liderado por Bolsonaro es el segundo, después de los Estados Unidos, por número de infecciones y muertes. La emergencia va más allá del drama de la salud: afecta a una zona en la que, incluso antes del Covid-19, una de cada tres personas ya sufría de inseguridad alimentaria. Con nosotros Benedetta Lettera, de Acción contra el hambre.

 

América Latina teme más las consecuencias de la pandemia desde el punto de vista de la pobreza que del mismo coronavirus. Así lo subraya la organización humanitaria Acción contra el Hambre (ACF), presente desde hace 40 años en unos 50 países del mundo, que habla de 29 millones de nuevos pobres. Y subraya que los gobiernos de los Estados Unidos y México han seguido trasladando a Guatemala a los migrantes detenidos en sus fronteras sin realizar los controles sanitarios necesarios. Esto ha provocado el regreso de migrantes afectados por el Covid-19, en un momento en que el sistema de salud está sometido a una grave presión. Hablamos con Benedetta Lettera, responsable de América Latina en Acf, sobre problemáticas que vuelven, pero también sobre la especificidad de las situaciones en Perú, Colombia, Guatemala:

En una región en la que una persona de cada tres ya vivía en condiciones de inseguridad alimentaria antes de la aparición de los primeros casos de Covid-19, la contracción del 5% de la economía -explica Lettera- y el aumento de más de 11 puntos de la tasa de desempleo, harán que la actual sea la crisis más grave del siglo pasado.

En el Perú, emergencia metropolitana en Lima

Las restricciones al desplazamiento y los cierres de fronteras han tenido un impacto negativo en las comunidades locales y en su capacidad para alimentarse. En Lima en particular, explica Benedetta Lettera, los mercados ambulantes no han tardado en reactivarse después de más de 40 días de lockdown y ya no se respeta el distanciamiento social obligatorio. Y en Perú también está tomando forma una especie de "desplazamiento interno": 165.000 personas, de hecho, han solicitado una traslado al gobierno por razones humanitarias. Lettera explica que su objetivo es dejar la capital y volver a sus ciudades de origen para hacer frente a la pérdida de trabajo y a la imposibilidad de mantenerse. En este momento, grupos de personas están caminando a lo largo de las principales carreteras del país esperando un medio de transporte. Ya ha habido informes de niños que han muerto durante sus viajes, así como de accidentes fatales.

En Colombia, el drama de los refugiados venezolanos

Desde Colombia - subraya la responsable de Acf para América Latina - llega la preocupación por los cientos de venezolanos que intentan regresar a su país: los autobuses llegan de diferentes zonas a las zonas fronterizas como, por ejemplo, Norte de Santander, y en estas circunstancias es esencial asegurar el equipamiento de protección para minimizar el riesgo de infección. La situación que viven los pueblos indígenas de la región amazónica y, en particular, la ciudad de Leticia, también es motivo de preocupación.

Guatemala entre las dificultades de salud y el retorno de los migrantes

Benedetta Lettera destaca una vez más que la Ciudad de Guatemala ha prorrogado el estado de emergencia hasta el próximo 4 de junio ante una doble alarma: por la falta de capacidad diagnóstica concreta y por el creciente fenómeno del retorno de los migrantes. Es uno de los sistemas de salud más frágiles de América Latina, con 13 médicos y enfermeras por cada 10.000 habitantes. Y el contexto es de grave incertidumbre económica: más del 70% de la población, de hecho, está privada de empleo y seguridad social y, de hecho, depende de los ingresos diarios de su trabajo. "Es de esperar un aumento de la malnutrición infantil, que ya afectaba a la mitad de los niños menores de cinco años del país antes de la pandemia", señala Lettera. Además de las difíciles condiciones de los migrantes obligados a regresar de otros países, hay que decir que se espera que el envío de dinero de los guatemaltecos en el extranjero disminuya por lo menos en un 25%.

En esos países, Acción contra el Hambre ha llevado a cabo una intensa actividad de distribución de alimentos y sigue vigilando de cerca el estado nutricional de los niños en las zonas fronterizas. En Guatemala y Nicaragua, también participa en el suministro de kits de higiene.

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