Luego de que la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) informara que asistirá a la marcha que se hará el 18 de febrero, por iniciativa de fiscales y jueces pero con participación de dirigentes políticos y de la ciudadanía en general, cuando se cumpla un mes de la muerte del fiscal Alberto Nisman, el vicepresidente de la institución, Waldo Wolff le respondió a los dirigentes kirchneristas que calificaron como "opositora" a la movilización.

"Me tiene sin cuidado que me acusen de opositor. Estamos en un Estado de derecho y ellos pueden opinar libremente. Nosotros no adherimos a ninguna bandería política, siempre lo dijimos", expresó el referente de la comunidad judía en diálogo con La Once Diez/Radio de la Ciudad, en el programa de Alejandro Almendros.

Sostuvo que la DAIA no encontró "ningún motivo para no ir, y sí muchos para ir" al encuentro que fue denominado Marcha del silencio. Y señaló: "Los mismos argumentos que usan para descalificar a quienes participan no los usan cuando en sus actos hay personajes con los que yo no me sentaría a tomar un café", dijo en alusión al gobierno nacional.

Acerca de la incertidumbre en torno del caso Nisman, expresó: "Llegar a la verdad no depende de nosotros, no manejo la Justicia. Lo que puedo decir es que las instituciones, donde tengamos un micrófono, vamos a seguir desenmascarando a aquellos que utilizan la falacia al servicio de sus intereses".

En este sentido, remarcó: "Nadie acercó pruebas de la pista siria" y se refirió a la presunta responsabilidad de Irán en el atentado contra la AMIA: "Nosotros no queremos que sean los iraníes, queremos encontrar a los culpables. Nos da lo mismo que sean iraníes o sirios, como si en el terrorismo y la geopolítica hubiera mucha diferencia entre Siria e Irán".

"Nosotros seguiremos reclamando. La justicia no es un bien partidario, es un buen universal de la república. No debe estar al servicio de los que creen que Argentina se termina en noviembre", culminó.