El Congreso Judío Latinoamericano (CJL) mantiene una reunión en Buenos Aires para acompañar, como todos los años, el reclamo de justicia de la comunidad judía de la Argentina, fortaleciendo los vínculos de las comunidades y expresando toda la solidaridad y respaldo a las acciones que llevan adelante la DAIA y la AMIA.
En la reunión participan los presidentes de las comunidades judías de la región, el presidente del CJL, Jack Terpins; el secretario general del CJL, Saúl Gilvich; y el director ejecutivo del Congreso Judío Mundial, Robert Singer.
En diálogo con la Agencia de Noticias el presidente del CJL, Jack Terpins, subrayó una actitud bipolar del gobierno argentino en relación a la resolución de la causa y opinó que “la comunidad judía, siempre está pagando una cuenta que no es propia” respecto al caso Nisman.
“Estamos rezando y esperando todos juntos para alcanzar una solución para el atentado de la AMIA y la muerte del fiscal Nisman”, expresó.
-¿Qué significa para usted y para el Congreso Judío Latinoamericano este nuevo aniversario del atentado?
-Es verdad que todos los años estoy acá para esperar una buena noticia sobre este tema, pero hasta ahora infelizmente esto no ha ocurrido y no veo ninguna perspectiva en el corto plazo para tener una solución a un problema tan delicado para la comunidad judía, no solamente de la Argentina sino del mundo entero.
Todo el mundo sabe lo que pasa en Argentina hoy con un problema tal como este sin solución.
-¿Cómo hace el CJL para seguir trabajando sabiendo que se hace difícil encontrar una respuesta a la falta de justicia en el tema AMIA?
-No diría difícil, es imposible. Cada momento que pasa hay una sensación de insatisfacción en la comunidad judía latinoamericana en relación al atentado a la AMIA. Yo les hablo del caso AMIA. El Caso AMIA es conocido en todo el mundo. En Washington este tema creó una imagen errada, mejor dicho, una imagen fea del gobierno argentino que no resuelve esto, que iba por buen camino y de repente cambia toda su posición.
-¿Qué pasa cuando usted y su organización recuerdan lo que fue el discurso de la presidenta en la ONU, hace varios años, y lo que vemos hoy?
Ese es otro problema. Esa es una bipolaridad de la posición argentina, que por un lado está a favor de resolver el asunto y por otro vuelve a cambiar su postura hacia Irán. Nuestra función es velar por los judíos.
-¿Qué se les dice a los familiares cuando uno ve llegar nuevamente esta instancia?
-Es muy difícil. Me acuerdo una vez, estaba en Israel y vino una señora a hablar conmigo de este asunto, era una argentina, y verdaderamente sentí que no tenía que decirle. No podemos hacer nada, nos sentimos impotentes para resolver esto, pero la verdad es que no acontece nada, no ocurre nada. El Congreso ha tenido en los últimos años relación con el gobierno argentino, en base al protocolo, que siempre lo hubo, han existido encuentros.
-¿El Congreso Judío Latinoamericano o Mundial ha tenido vínculos con el gobierno argentino en los últimos años?
-Encontramos promesas (del gobierno argentino) de que esto se iba a resolver y tuvimos encuentros con el fallecido Néstor Kirchner y después con la Presidenta
Cristina Kirchner, pero han sido promesas que han quedado en la nada.
¿Cómo están viendo ustedes el tema del Memorándum que ha generado tanta dificultad?
-Los judíos nos sentimos mal, más que cualquier otro, en relación a este acuerdo porque conocemos la posición del país (Irán) que quiere eliminar a Israel del mapa, y que ha hecho un acuerdo con las potencias mundiales. Verdaderamente nos preocupa.
-¿Cómo ve a la comunidad judía argentina?
-Es una comunidad muy sufrida cuando acontece un asunto que no tiene solución. Surgió otro, el caso Nisman, que es otra polémica dentro de la comunidad argentina. Yo no voy a juzgar o prejuzgar cualquier cosa, pero las cosas acá se complican mucho para la comunidad judía, siempre están pagando una cuenta que no es propia. Desde que ocurrió el atentado, en el Congreso Judío Mundial y en el Congreso Judío Latinoamericano existe un espacio especial para los representantes de la AMIA y la DAIA para hablar sobre la situación, la preocupación es muy grande. Es muy preocupante la situación de la Argentina, donde no se sabe la diferencia entre un árabe y un judío, son la misma cosa. Aquí en la Argentina está todo muy politizado, entonces la reacción del pueblo es verdaderamente grande y cuando un pueblo sufre una injusticia como esta, es muy triste.
-¿Qué opinan del tema del antisemitismo?
-Estamos muy preocupados, con lo que está sucediendo en el mundo, en Francia, en Inglaterra, en Brasil, aquí en Argentina y en América en general.
-Para finalizar, la Presidenta deja su gobierno en el mes de diciembre, ¿cuál es el mensaje a las autoridades nacionales en esta visita que está haciendo por el atentado a la AMIA?
-Creo que el gobierno argentino tiene que ver lo que los judíos han hecho por este país, lo que los judíos han hecho por América Latina y no procurar defectos. La comunidad judía es una comunidad laboriosa que quiere a la Argentina. Una Argentina, repito, politizada. Quien se quiere pelear con Argentina habla mal de Maradona, habla bien de Pelé y eso despierta el patriotismo. El argentino es muy patriota, los judíos ayudaron a construir este país y no merecen ser maltratados.
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