La tensión que mantienen Irán y Estados Unidos está preocupando al Papa, y no es para menos. Este 9 de enero de 2020 el Sumo Pontífice, en su tradicional discurso anual dirigido al cuerpo diplomático acreditado ante el Vaticano, ha instado a ambos países a «que todas las partes interesadas eviten el aumento de la confrontación y mantengan encendida la llama del diálogo y del autocontrol, en el pleno respeto de la legalidad internacional».

El papa Francisco se dirigió a los embajadores de los más de 180 países presentes: «Las señales que llegan desde toda la región luego del aumento de las tensiones entre Irán y Estados Unidos son particularmente perturbadoras«.

El Sumo Pontífice se refirió también al aumento de  los problemas políticos en los países latinomericanos, haciendo especial hincapié en la crisis de Venezuela: «Quiero recordar especialmente a Venezuela, para que continúe presente el compromiso de la búsqueda de soluciones«.

Y añadió: «Suscita preocupación la multiplicación de crisis políticas que se van extendiendo en numerosos países del continente americano, con tensiones e insólitas formas de violencia que empeoran los conflictos sociales y generan graves consecuencias socioeconómicas y humanitarias».