“Estamos ampliando la cantidad de talleres para ayudar a la gente a buscar un empleo nuevo, en los cuales van a participar presencial o virtualmente más de 1.500 personas. También tratamos de aumentar la infraestructura y agregar por lo menos una cuarta aula con equipamiento informático, y expandir los convenios con la Ciudad de Buenos Aires y el Ministerio de Trabajo. Pensamos trabajar con más empresas difundiendo los conceptos de responsabilidad social empresaria a través de procesos de sensibilización y capacitación”, expresó. Además buscarán ampliar la oferta para articular con los estudiantes de 5º año del secundario de la red escolar judía para asesorarlos en temas vocacionales y de búsqueda de empleo.  Sin embargo, la gran novedad que estuvo siendo desarrollada el año pasado es que habrá un conjunto de programas especiales para atender a poblaciones en condiciones de alta vulnerabilidad, como personas con discapacidad o inmigrantes, en función de la demanda que traiga algún ente. “Hace un par de años venimos trabajando con COPIDIS, que es el área de discapacidad del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y articuladamente con el Área de Programas Sociales, para tratar de darles una oportunidad de empleo a quienes reciben un subsidio de la AMIA”, dijo Toker. “Dentro de las dificultades de un mercado de trabajo con muchos vaivenes y preocupaciones, en un contexto bastante complejo, el 2014 fue un año muy exitoso: hemos alcanzado una cantidad muy importante de pedidos de empresas y hemos aumentado las acciones de capacitación, en particular las gratuitas para personas desocupadas. Hemos ofrecido más de 3.000 vacantes para distintas áreas, tanto técnicas como de informática, y no solamente en la Ciudad de Buenos Aires, sino que también pudimos llevar estas propuestas al interior del país, acompañados por empresas o por el Ministerio de Trabajo de la Nación”, remarcó. La Oficina de Empleo de la AMIA también ha hecho convenios con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, para el cual estuvo haciendo la provisión de la selección de los recursos humanos que se fueron incorporando como agentes de tránsito y también brindando muchas actividades de capacitación y orientación para la búsqueda de empleo. Otra de sus grandes iniciativas es el Programa Valor, que trata de llevar las prácticas de responsabilidad social empresaria a las cadenas de valor de compañías de tamaño grande, mediano y pequeño. “Se trata de que vayan reconvirtiendo su gestión teniendo en cuenta no solamente los objetivos económicos que las guían, sino también empezando a tomar en consideración los contextos social y ambiental, y tratando de modificar sus actitudes y procesos, considerando que hay que cuidar el mundo. En este sentido también hemos trabajado con varias grandes empresas y ya estamos renovando varios de esos acuerdos”, dijo Toker. “Algo que quizás no se sabe, pero que es importante, es que las organizaciones de la comunidad judía pueden acceder a la búsqueda de personal y a los cursos de capacitación en forma totalmente gratuita, como una forma de colaborar con el mejoramiento del desempeño de las organizaciones comunitarias. Si bien mayoritariamente el personal que ofrecemos es de perfil administrativo comercial y de mandos medios, también hacemos búsquedas gerenciales, si lo requieren las empresas”, explicó. Desde su implementación en el 2002, más de 30.000 personas han encontrado trabajo a través de la Oficina de Empleo de la AMIA, más de 50.000 han participado, personalmente o a distancia, de los procesos de capacitación y orientación. “Siempre estamos estableciendo nuevos servicios no solamente para las personas de la comunidad, sino para toda la sociedad”, destacó. Finalmente Toker consideró que lo más importante de esta iniciativa es que ha conseguido un gran prestigio y renombre, tanto que el Ministerio de Trabajo de la Nación admitió intentar hacer la red nacional de oficinas de a imagen y semejanza de la forma de trabajo de la AMIA, reconociendo que era un modelo único en el país. “Hoy la red de empleos de AMIA, con sus 11 oficinas, es la más red privada más grande del país, tiene la base de datos de postulantes más importante y casi 15.000 empresas han solicitado alguna vez el servicio. Este prestigio es el que nos permite, en muchos casos, generar convenios y articulaciones con organismos e instituciones del más variado origen y característica”, destacó.