Autoridades del Partido comunista a nivel del poblado de Laskuy, municipio de la ciudad de Hotan, anunciaron el 29 de abril que todos los restaurantes y supermercados deben contar con al menos “cinco marcas distintas de alcohol y cigarrillos” y colocarlas en aparadores vistosos antes del 1 de mayo.
Radio Free Asia (RFA), informó que los propietarios que no cumplan verán sus tiendas cerradas y enfrentarán acciones legales.
Las autoridades de Xinjiang piensan que los uigures musulmanes que no fuman están practicando “una forma de extremismo religioso”, dijo el secretario del comité del Partido del poblado Adil Sulayman a RFA..
“La gente va a cumplir para evitar el castigo, pero no lo harán de buena gana”, dijo Ilshat Hassan, vicepresidente de la Asociación Americana Uygur, con sede en Nueva York y sin fines de lucro, en una entrevista telefónica. “¿Cómo pueden las autoridades forzar a las personas a vender algo que no quieren?”.
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