El Obispo Marino participó de la bendición del templo y de una imagen de la Iglesia Ortodoxa Rusa

El Obispo Marino participó de la bendición del templo y de una imagen de la Iglesia Ortodoxa Rusa

El obispo de Mar del Plata, monseñor Antonio Marino, estuvo ayer, por primera vez, en el templo de los "Santos Mártires Reales" de la Iglesia Ortodoxa Rusa, ubicada en el barrio Alfar de Mar del Plata. Allí, monseñor Leonid, obispo para la diócesis de Argentina y Sudamérica de la Iglesia Ortodoxa Rusa del Patriarcado de Moscú, presidió la misa y luego bendijo el templo y la imagen de San Nicolás, arzobispo de Myra – cuyas reliquias se encuentran en la ciudad italiana de Bari

Monseñor Antonio Marino, se mostró muy agradecido por la invitación a participar del acto y también de este encuentro ecuménico cordial y fraterno.

"Me siento muy honrado por esta invitación. El culto a Dios es lo más importante en la vida del ser humano, las dos iglesias tenemos una base común indestructible, confesamos a la Trinidad Santísima, al Hijo eterno de Dios, hecho hombre para salvarnos por obra del Espíritu Santo en el seno de María.

Y esa base es muy profunda además, las dos Iglesias tenemos una estructura sacramental idéntica, los siete sacramentos, y la sucesión apostólica, eso es una base común enorme", dijo monseñor Marino durante la celebración de la misa, a la comunidad ortodoxa rusa presente.

"Y además gracias a Dios, hace tiempo hay un corriente de caridad, de simpatía y de acercamiento. Por eso el gusto de intercambiar con monseñor Leonid, este momento. San Nicolás de Myra, también llamado en occidente, Nicolás de Bari por el lugar donde descansan sus restos; por razones históricas, durante las invasiones de los musulmanes los restos fueron trasladados a Bari pero nos une. Es uno de los santos más populares de la cristiandad, también protector de los niños, sobre todo en occidente, que así se lo presenta. A él le pedimos que nos mantenga siempre en la fe, que es un gran don y una gracia y que sigamos intercambiando saludos de paz, de fe común entre las dos iglesias", concluyó monseñor Marino. Luego monseñor Leonid, entregó un presente como símbolo y recuerdo de esta visita y encuentro.

Luego de la misa, se realizó la bendición de la imagen de San Nicolás de Myra, y la bendición del templo. Participó Jorge Kuznetzov, Cónsul Honorario de la Federación de Rusia en Mar del Plata, el sacerdote hieromonje Gerásim; el presbítero Pablo Etchepareborda, párroco de San Pío de Pietrelcina, Luis Ignoto, delegado municipal del Puerto; representantes de la Armada Argentina, colectividades del Centro de Castilla y León, de Portugal, miembros de la Sociedad Italiana de Mar del Plata, de la Casa de Rusia, de la Asociación de Fomento de Alfar, de la comunidad de San Pío de Pietrelcina, entre otros.

Comentá la nota