Obispo espera menos robo al Estado y que jóvenes tengan más protagonismo

El obispo de Misiones, Mons. Mario Melanio Medina, espera que luego de la visita del papa Francisco haya menos robos en la administración pública, que los casos de corrupción no queden en la impunidad y que la ciudadanía reaccione ante ellos. Dijo que otro de los grandes desafíos es luchar contra la pobreza en la que están sumidos miles de paraguayos.

El obispo de Misiones dijo que el Paraguay está viviendo un momento de recuerdos y anécdotas, pero que a nivel nacional “debemos ir pensando en no quedar solo en las nostalgias”. Agregó que la ciudadanía debe reflexionar para ser protagonista de los cambios.

Explicó que en el Bañado Norte, el Papa fue muy claro y que el Gobierno debe buscar una solución para esa gente, que quiere asegurar su tierra y acceder a una vivienda digna.

“El presidente Horacio Cartes dijo al Papa que va a luchar contra la corrupción y la impunidad. Esperamos que el Ejecutivo ponga en práctica su promesa y que no haya tanto robo en la administración pública”, remarcó.

Como Iglesia, indicó que la Conferencia Episcopal Paraguaya delineará su pastoral para enfrentar los desafíos, y adelantó que en la diócesis de Misiones ya trabajan en forma mancomunado con los estamentos pastorales. En cuanto a la lucha contra la corrupción, indicó que el primer paso debe darlo el Gobierno, “porque hay tanta corrupción como en la Contraloría, pero aún nada se hace para sanear esa institución”. Agregó que la gente debe movilizarse para que haya castigo a los responsables de la corrupción y recuperar los bienes malhabidos. “Si no se llega a ese ideal, será solo discursos, literatura, pero al final nada cambiará”, afirmó.

Para Medina, otro gran desafío es luchar contra la pobreza porque hay miles de paraguayos en esa situación, lo que preocupa a la Iglesia y al Gobierno.

Al referirse a la posibilidad de creación de nuevas jurisdicciones eclesiásticas, indicó que el Papa no prometió nada, pero se seguirá luchando para reestructurar la Iglesia. “Ese trabajo depende de los obispos y la intención es adelantar los trabajos y crear nuevas diócesis en Amambay, Canindeyú y Caazapá. Se necesita una cantidad de gente para que una nueva diócesis tenga para sostenerse”, resaltó.

Con respecto al llamado que hizo a los jóvenes para no que no sean “jubilados”, Medina resaltó que la Pastoral Social asumió el compromiso de no ser indiferente ante la realidad, para ser protagonista en la sociedad eclesial y política.

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