La jubilación anticipada de un juez abrió hace un mes una vacante del Tribunal Supremo de Brasil y este pasado jueves el presidente Luiz Inácio Lula da Silva designó para el cargo a Jorge Messias, un jurista evangélico.

Messias, que actualmente ocupa el cargo de abogado general de la Unión, es también el principal emisario del Gobierno en sus intentos de mitigar el rechazo que el mandatario y el Partido de los Trabajadores generan entre los evangélicos, una comunidad que gana peso político en cada elección. Si el Senado ratifica su nombramiento, la máxima corte de Brasil tendrá entre sus once miembros dos evangélicos. Será el tercer cristiano evangélico entre los 172 ministros que han servido en la Corte Suprema en sus 134 años de historia.

Además, Messias sería el más joven de los togados y tendría por delante tres décadas en el puesto, porque se jubilan a los 75 años.

Los evangélicos suponen el 27% de la población, más de 47 millones de brasileños. Por ello, el nombramiento de Messias también añade una estrategia electoral para un sector que hace tiempo le es esquivo a Lula, el de los evangélicos, que hoy prefieren en su mayoría a Bolsonaro pero que Lula está dispuesto a atraer pensando en la campaña de 2026.

Lula, junto con Messias y otros políticos, en un momento en que oran juntos

Los magistrados del Supremo brasileño son los intérpretes últimos de la Constitución, pero en los últimos años además de ejercer esa función, han ido ganando influencia política.

El otro juez de evangélico de la Corte Suprema -nombrado por Bolsonaro- André Mendonca, publicó en redes: "Felicito al Ministro Messias por su nominación a la Corte Suprema. Es un candidato idóneo de la Fiscalía General y cumple con los requisitos constitucionales. Asimismo, felicito al Presidente de la República por su nominación. Messias contará con todo mi apoyo en el diálogo republicano con los senadores".

El perfil de Messias

Messias tiene 45 años, es licenciado en Derecho por la Universidad Federal de Educación Superior (UFPE) de Recife y posee una maestría y un doctorado por la Universidad de Brasilia (UnB).

Considerado prudente y discreto, Messias nació en Pernambuco, como Lula, y es miembro de la Iglesia Bautista Cristiana de Brasilia, donde es diácono. Suele utilizar sus discursos y redes sociales para comentar cómo su análisis del mundo se basa en una cosmovisión bíblica.

Aunque no milita en el Partido de los Trabajadores, se le considera muy cercano a sus Gobiernos. Funcionario de carrera, hace una década ya ejercía un alto cargo en el Ejecutivo de Dilma Rousseff.

Fue subdirector de Análisis y Monitoreo de Políticas Gubernamentales de la Casa Civil, secretario de Regulación y Supervisión del Ministerio de Salud y asesor jurídico del Ministerio de Educación y Ciencia, Tecnología e Innovación.

También trabajó en la Procuraduría General del Tesoro Nacional y en la Procuraduría General del Banco Central. En 2023, Lula nombró a Messias jefe de la Procuraduría General de la República (AGU), convirtiéndose en uno de los colaboradores más cercanos del presidente.

Desde que Lula lo nombró abogado general de la Unión, en 2023, ha desempeñado algunas misiones sensibles, como representar al presidente en la Marcha para Jesús, la mayor fiesta evangélica de Brasil, organizarle reuniones con líderes de Iglesias protestantes o contratar un bufete de abogados en Estados Unidos para defender al Gobierno frente al tarifazo impuesto por Donald Trump.