Luis Infanti: "La corrupción es el asesinato social de miles de familias marginadas"

El obispo de Aysén considera que decir "no" a la pobreza es decir "no" a la riqueza

 "Declaramos ilegal la pobreza" es una emergente campaña mundial que surge de los movimientos relacionados con temas ambientales, y esencialmente del AGUA, que busca una definición de la ONU en 2018, año en que recurren los 70 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), para que la humanidad dé un salto cualitativo en la dignidad de las personas, de los pueblos, de las culturas, para abrir la historia hacia otro mundo posible y factible.

Muchos indicadores manifiestan laconciencia de la humanidad de estar viviendo un nuevo milenio marcado por una nueva época histórica. La edad de la piedra, la invención del círculo, el paso de comidas crudas a cocidas, la invención de la escritura, son algunos de los hitos que marcaron épocas pasadas y revolucionaron a la humanidad.

Los últimos 50 años la humanidad ha masificado el poder de las ciencias, de la tecnología, de las comunicaciones... como nunca en la historia, y a un ritmo vertiginoso y sorprendente. El villorrio más pobre y abandonado de África o de América Latina tiene acceso hoy a las mismas tecnologías de los más famosos centros de poder mundial.

Esto, lejos de haber creado mayor bienestar, mayor integración, mayor comunión, mayor comunicación, mayor desarrollo, contradictoriamente ha profundizado la ya enormebrecha entre privilegiados y marginados.

Los horrores de las guerras han abierto decididos anhelos y búsquedas de paz, sin embargo la industria armamentista sigue siendo la más rentable del mercado, y la silenciosa carrera nuclear tiene a nuestro Planeta al borde de una masiva devastación.

Cada día tenemos mayor conciencia y luchamos por valorar y cuidar el medio ambiente, sin embargo nuestro Planeta está siendo dramáticamente siempre más maltratado, depredado, devastado, destruido. La llamada crisis ecológica está sacrificando nuestra madre tierra, haciendo desaparecer a ritmo acelerado especies animales, vegetales..., y la humanidad misma no duerme sueños tranquilos, viendo graves amenazas a su vida.

Para leer el artículo completo, haga click aquí.

Comentá la nota