Investigan por conducta inapropiada a sacerdote que celebró Misa inaugural de Joe Biden

Investigan por conducta inapropiada a sacerdote que celebró Misa inaugural de Joe Biden

El sacerdote jesuita Kevin O'Brien, que celebró en enero la Misa de toma de posesión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está bajo investigación por presunta conducta inapropiada, informó la universidad de California que dirige. 

 

El P. O'Brien es presidente de la Universidad de Santa Clara (SCU), ubicada cerca de San José, California. El presbítero presidió la Misa del 20 de enero en la Catedral de San Mateo en Washington D.C., a la que asistió el presidente Biden el día de su investidura. 

Una declaración del 15 de marzo del presidente de la junta de la universidad anunció que recientemente se había enterado de “relatos de que el padre O'Brien exhibía comportamientos en entornos adultos, que consistían principalmente en conversaciones, que pueden ser inconsistentes con los protocolos y límites establecidos por los jesuitas”.

El presidente John M. Sobrato dijo que la universidad se está tomando la denuncia en serio y que el provincial de la Provincia Oeste de los Estados Unidos de la Compañía de Jesús, el P. Sean Carroll, ha iniciado una investigación independiente. 

Según los informes, el P. O'Brien conoce a la familia Biden desde hace al menos 15 años, que se remonta a cuando servía en la Universidad de Georgetown, según SCU. Además de la Misa de este año, presidió la Misa por Biden y su familia en 2009 y en 2013, cuando Joe Biden juró como vicepresidente, informó Mercury News. 

Según los informes, el sacerdote era popular y querido como presidente de SCU, un cargo que asumió durante julio de 2019. Era un colaborador frecuente de los medios MSNBC, CNN y el Washington Post sobre temas relacionados con la Iglesia.

La Universidad de Santa Clara, establecida en 1851, cuenta con el actual gobernador de California, Gavin Newsom, y el exgobernador Jerry Brown, entre sus alumnos. 

El P. Carroll instó a los testigos del comportamiento inapropiado a que se pusieran en contacto con la Oficina Provincial Oeste de los Estados Unidos de los jesuitas. 

“Es importante que cualquiera que sea testigo de acciones que crea que son incompatibles con los valores o reglas [de la universidad] pueda compartir sus preocupaciones y tenga confianza en que serán tomadas en serio”, dijo el P. Sobrato. 

“Al mismo tiempo, respetamos plenamente el derecho del P. O'Brien a una investigación justa e imparcial, y apreciamos su firme convicción de que cualquier denuncia que lo involucre debe llevarse a cabo con el más alto nivel y ser investigada de manera cuidadosa e independiente”, agregó

Una portavoz de la provincia occidental de los jesuitas, cuando fue consultada por las noticias locales, se negó a proporcionar más detalles sobre la presunta mala conducta, citando las prácticas de confidencialidad de la orden. 

“Los jesuitas están sujetos a un código de conducta profesional, y la provincia investiga las acusaciones que pueden violar o comprometer los límites establecidos”, dijo Tracey Primrose al San Jose Mercury News.

El P. O'Brien, que ha sido puesto en licencia, ha aceptado cooperar plenamente con la investigación. 

Por su parte, el P. Sobrato dijo que la universidad no proporcionaría informaciones provisionales, pero comunicaría los resultados finales de la investigación. 

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