Hay un motivo muy claro por el cual el Señor “nos ha enviado al Espíritu Santo”: porque se puede renacer “de ese poco que somos” solamente con “la ayuda de la misma fuerza que ha hecho resurgir al Señor: con la fuerza De Dios”. Solos no podemos lograrlo. Lo afirmó el Papa Francisco en la homilía de la misa de hoy en la Casa Santa Marta, según refirió Vatican News.

 

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“Nosotros nada podemos sin el Espíritu”, explicó el Pontífice, recordando que la vida cristiana no es solo comportarse bien, hacer esto, no hacer lo otro. “Nosotros podemos hacer esto”, se puede incluso escribir la propia vida “con caligrafía inglesa”, pero la existencia cristiana renace del Espíritu y, por lo tanto, hay que dejarle sitio. Es el Espíritu quien nos hace “resurgir de nuestros límites, de nuestras muertes, porque nosotros tenemos tantas, tantas necrosis en nuestra vida, en el alma”.

 

Una vida cristiana, “que se dice cristiana, que no deja sitio al Espíritu y no se deja sacar adelante por el Espíritu, es una vida pagana, disfrazada de cristiana “, advirtió el Obispo de Roma. El Espíritu es “el protagonista de la vida cristiana, el Espíritu -el Espíritu Santo- que está con nosotros, nos acompaña, nos transforma, vence con nosotros. Nunca nadie ha subido al Cielo sino Aquel que ha descendido del Cielo, es decir Jesús. Él ha descendido del Cielo. Y Él, en el momento de la Resurrección, nos dice: ‘Reciban al Espíritu Santo’, será compañero de vida, de vida cristiana”.

 

Invocó Francisco: “Pidamos al Señor la gracia que nos da esta conciencia de que no se puede ser cristianos sin caminar con el Espíritu Santo, sin actuar con el Espíritu Santo, sin dejar que el Espíritu Santo sea el protagonista de nuestra vida”.

 

Se puede renacer de lo poco que somos, de “nuestra existencia pecadora”, solo con “la ayuda de la misma fuerza que ha hecho resurgir al Señor: con la fuerza de Dios” y, por ello, “el Señor nos ha enviado al Espíritu Santo”. Lo recordó hoy, 30 de abril de 2019, en la prédica que concentró en la respuesta de Jesús a Nicodemo (propuesta por el Evangelio del día), quien pregunta cómo puede suceder esto.

 

Todos hacen la pregunta de Nicodemo, en todas las épocas, aseguró el Papa. Jesús habla de “renacer desde lo alto” y el Papa expone este vínculo entre la Pascua y el mensaje de renacer. El mensaje de la Resurrección del Señor es “este don del Espíritu Santo”, y, efectivamente, en la primera aparición de Jesús a los apóstoles, el mismo domingo de la Resurrección, les dice: “Reciban al Espíritu Santo. ¡Esta es la fuerza! Nosotros nada podemos sin el Espíritu”.

 

Entonces, el Espíritu Santo es “el compañero de cada día”, don del Padre, don de Jesús. Hay que preguntarse cuál es su lugar en nuestra vida, “porque tú no puedes caminar en una vida cristiana sin el Espíritu Santo”.