Construida “en homenaje” a los musulmanes caídos por Francia durante la Gran Guerra, pero también por “motivos geoestratégicos”: la Gran Mezquita de París (GMP) celebra este miércoles, durante una ceremonia en la que debe participar Emmanuel Macron, el centenario de la colocación de su primera piedra.

Construida mucho antes de las grandes oleadas de inmigración, el lugar de culto musulmán es la primera mezquita metropolitana erigida en la era contemporánea.

En 1920, se vota en el Parlamento un proyecto de ley cuyo ponente es Edouard Herriot, entonces diputado, y que prevé un Instituto musulmán que incluye una mezquita, una biblioteca, una sala de conferencias.

En marzo de 1922 se decidió la orientación de la futura sala de oración en relación con La Meca.

El 19 de octubre del mismo año tuvo lugar la solemne inauguración de las obras del futuro edificio, en presencia del mariscal Hubert Lyautey, estratega militar y figura emblemática de la colonización francesa en Marruecos, en terrenos pertenecientes a los Hospitales de París.