Un cura cercano al Papa encabeza una huelga de hambre por Milagro Sala

Un cura cercano al Papa encabeza una huelga de hambre por Milagro Sala

Organizaciones sociales montaron un acampe en Plaza de Mayo en rechazo a la incomunicación de la dirigente.

Un sacerdote del grupo "Curas en Opción por los Pobres", cercano al Papa Francisco, comenzó una huelga de hambre en Plaza de Mayo en solidaridad con la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, quien se encuentra detenida e incomunicada.

Se trata de Francisco "Paco" Olveira, párroco de la iglesia Nuestra Señora de Fátima de la Isla Maciel, en Avellaneda. Junto a él, otros cuatro militantes de distintas organizaciones comenzaron una huelga de hambre.

La protesta, que comenzó el viernes pasado, incluye un acampe en el centro de la plaza promovido por la Tupac Amaru y acompañado por Madres en Lucha por la Violencia Institucional y Curas en Opción por los Pobres.

En febrero, poco después de que fuera detenida, el Papa Francisco le envió un rosario a Sala y expresó su preocupación por la detención. El gesto desató la furia de los gobiernos nacional y jujeño. En fila, salieron a cuestionarlo Gabriela Michetti, Elisa Carrióy el gobernador Gerardo Morales.

Incluso, el Papa le expresó su molestia a Mauricio Macri cuando lo visitó en el Vaticano.Como explicó LPO, el reclamo por la detención de Sala fue uno de los momentos más incómodos de aquella gélida reunión.

La huelga de hambre es en solidaridad con Sala, que hace tres días inició la misma medida en el penal de Alto Comedero, tras ser sancionada con 10 días de incomunicación por presunta "inconducta y haber recibido llamados no permitidos".

Olveira sostuvo que "es una obligación moral y un deber de conciencia" apoyar a Milagro Sala. "Desde enero venimos denunciando que su detención es ilegal porque viola la presunción de inocencia, más allá de que se investigue lo que se tenga que investigar. Es la punta del iceberg de la persecución de los movimientos sociales que se organizan cuando el Estado está ausente", definió el cura.

En declaraciones a radio Vorterix, Olveira afirmó además que "ni siquiera los abogados de Milagro Sala saben por qué se le dictó esa incomunicación, con lo que vemos que además de tenerla presa, lo que están haciendo es empeorar las condiciones de esa detención". El cura agregó que ante la "falta de aval" de la prisión, Sala termina siendo "una presa política; ella y los 11 dirigentes que también se encuentran detenidos".

"Creemos que hay que investigar todo y si se le comprueba un delito tendrá que pagarlo, pero esa investigación debería ser con ella en libertad, ante la presunción de inocencia", añadió el religioso, y señaló que "cuando ya no la podían tener más tiempo presa por algún motivo, le armaban otra causa. Todo es ilegal, hasta Amnistía Internacional te lo dice".

La huelga de hambre de Olveira y los militantes y el campamento continuarán hasta el 22 de agosto, cuando termina el castigo impuesto a la líder de la Tupac Amaru, pero advirtieron que si le extienden la incomunicación van a "continuar en la plaza".

El coordinador nacional de la Tupac Amaru, Alejandro Garfagnini, culpó al gobierno de Gerardo Morales por el castigo a Sala. "Como en el caso de su detención, este castigo también fue irregular y no se lo comunicaron al abogado de Milagro. Es un capítulo más de la violencia y la persecución de Morales con anuencia de Gobierno nacional", cuestionó.

Según los dirigentes en huelga de hambre, Sala no está castigada por "inconducta" sino "por haber reclamado que se cierren tres celdas de castigo que existen en el penal y que fueron denunciadas hasta por Naciones Unidas (ONU)".

Sala fue detenida el pasado 16 de enero acusada de "instigación" de una protesta por el largo campamento que se llevó a cabo frente a la Casa de Gobierno provincial. Si bien en esa causa fue excarcelada no recuperó la libertad por la acumulación de otros procesos penales en su contra, vinculados con supuestas irregularidades en el manejo de fondos del Estado nacional destinados a la construcción de viviendas. 

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