El cardenal Ángel Rossi destacó el legado de fe, cultura y servicio que este patrimonio inspira a la comunidad.
El arzobispo de Córdoba, cardenal Ángel Rossi SJ, participó en la celebración por los 25 años de la declaración de la Manzana Jesuítica y las Estancias Jesuíticas como Patrimonio Cultural de la Humanidad. La actividad destacó la importancia histórica y cultural del sitio, considerado un símbolo central de la identidad cordobesa.
La Universidad Nacional de Córdoba (UNC) invitó al arzobispo a la conmemoración, que se enmarcó en un programa de actividades culturales y patrimoniales durante noviembre, acercando este patrimonio a miles de vecinos.
Durante el acto, el cardenal Rossi destacó la relevancia de la Manzana Jesuítica más allá de su valor histórico. Señaló que sus patios, bibliotecas y muros representan un legado vivo de fe, conocimiento y cultura, y subrayó la importancia de transmitir estos valores a las nuevas generaciones.
El arzobispo invitó a reflexionar sobre el significado actual de ser Patrimonio de la Humanidad, recordando que mantener viva la Manzana no implica únicamente conservar los edificios, sino preservar una visión de dignidad, servicio y aprendizaje que inspire a la comunidad.
El acto concluyó con un mensaje de esperanza y bendición, en el que se deseó que la Manzana Jesuítica continúe siendo un espacio de sabiduría, encuentro y crecimiento para toda Córdoba.+
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