Lauder instó al Departamento de Policía de Nueva York a rastrear rápidamente al autor del ataque y a determinar claramente si se trató de un crimen de odio.

"Es trágico que en una sociedad tolerante como la de Nueva York, una persona pueda ser objeto de ataque debido a su religión", dijo Lauder. "Tengo una gran fe en la policía de Nueva York, y estoy seguro de que las autoridades de seguridad están haciendo todo lo posible para detener al autor de este horrible ataque y determinar si se trató de un crimen de odio. En cualquier caso, nuestra sociedad en su conjunto debe hacer todos los esfuerzos para asegurar que las personas de todas las creencias siguen siendo seguros y libres para vivir sus vidas como lo deseen, sin el temor a la violencia y el odio”.

"En nombre de los judíos de todo el mundo, deseo extender mis más profundas condolencias y solidaridad a la comunidad musulmana y rezo para que este haya sido un incidente aislado que nunca se repita", expresó Lauder.

El Imam Maulama Akonjee y su asistente Thara Uddin fueron baleados a quemarropa el sábado cuando salieron de la mezquita que sirve a la comunidad de Bangladesh en Queens, Nueva York. Ambos estaban vestidos con ropa tradicional musulmana.