En un clima de fiesta y devoción, Mar del Plata celebró su tradicional fiesta en honor a Nuestra Señora de Lourdes

En un clima de fiesta y devoción, Mar del Plata celebró su tradicional fiesta en honor a Nuestra Señora de Lourdes

La comunidad local y turista se congregó en la Gruta de Lourdes, corazón espiritual del Puerto, para celebrar la popular fiesta en honor a Nuestra Señora de Lourdes

El pasado 11 de febrero, la comunidad local y turista se congregó en la Gruta de Lourdes, corazón espiritual del Puerto, para celebrar la popular fiesta en honor a Nuestra Señora de Lourdes.

Por primera vez, esta tradicional celebración estuvo presidida por monseñor Ernesto Giobando, Administrador Apostólico de la Diócesis de Mar del Plata. Acompañaron la celebración el Pbro. Miguel Cacciutto, párroco de la Sagrada Familia del Puerto y el Pbro. Luciano Alzueta -quien predicó la novena de preparación a la Fiesta- entre otros sacerdotes y seminaristas.

Estuvieron presentes las Pequeñas Hermanas de la Divina Providencia, quienes gestionan día a día la Gruta y la misión caritativa del Hogar de Enfermos. Participaron también representantes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, además de autoridades del Poder Ejecutivo Municipal y representantes de distintas colectividades y cofradías ligadas a la comunidad portuaria.

Durante la celebración, Mons. Giobando hizo foco en el testimonio de santidad que nos regala Santa María Antonia de Paz y Figueroa, Mama Antula, canonizada en la Basílica Vaticana ese mismo día por el Papa Francisco. Con su testimonio, sensibilizó a los presentes en la importancia de atender las desigualdades y fundamentalmente, propiciar las obras de caridad y piedad que inspiran tanto la devoción a Lourdes como a Mama Antula.

Al finalizar la Santa Misa, la multitud inició la tradicional procesión por las calles del puerto, realizando un homenaje a los hermanos que perdieron la vida en el mar y consagrando los frutos portuarios al amparo de la Inmaculada Concepción.

Finalmente, de regreso en la Gruta, el Administrador Apostólico bendijo a los presentes con el Santísimo Sacramento e instó a la comunidad a confiar a las providentes manos de Dios, la difícil situación que vive nuestra Patria.

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