Las víctimas y familiares del Ycuá Bolaños quedaron decepcionadas tras lo que iba a ser la última parada del papa Francisco en el lugar, para bendecir la escultura de  400 palomas que representan la tragedia del 1 de agosto del 2004.  

"Nos cerraron una vez más las puertas; estábamos esperando a Francisco, que nos recobró la esperanza, pero la perdimos de vuelta", lamentó entre sollozos Mirta Balmaceda, familiar.Ocurrió que el  Sumo Pontífice tenía previsto ingresar a bordo del papamóvil y su comitiva con dirección al memorial sobre la avenida Artigas, en el sentido de salida de Asunción, pero la organización cambió el trayecto y se dirigieron en sentido contrario, donde estaban ubicados miles de feligreses que esperaban verlo. El resultado: Unas sesenta personas derivadas en total a los puestos de salud, entre ellas dos víctimas de la tragedia donde murieron 400 personas por el incendio del supermercado Ycuá Bolaños hace casi once años.

El cambio se dio porque algunos asistentes sobrepasaron vallas de seguridad, según la versión de los guardias de la Presidencia que se encontraban en el sitio.Desde el cruce de Artigas y Santísima Trinidad solo se observó el momento en que la comitiva papal desvía el itinerario original. Al realizar el desvío, uno de los policías de la motorizada atropelló a una niña, según denuncias. La Segunda Compañía del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP), de Trinidad,  indicó que al menos dos personas presentaban heridas similares al producirse  un accidente vehicular.

Sí se pudo ver que una vez que la comitiva eligió otro carril, las personas que estaban aguardando del otro lado sobrepasaron las vallas.Llantos.  

Víctimas y familiares del Ycuá Bolaños, además de vecinos de Trinidad, responsabilizaron a los organizadores del evento por los incidentes ocurridos y aprovecharon la ocasión para pedir la renuncia del padre Kleber, quien privó, de acuerdo a lo que dicen, que una víctima hable al papa Francisco si decidía parar o quedarse brevemente en el lugar. Reclamaron además que la comitiva de seguridad de la Presidencia pisó la enorme bandera paraguaya con fotos de los 400 fallecidos.

Los representantes de las víctimas relataron todos los inconvenientes que significó el paso del papa Francisco por el memorial, como el tardío cierre de la avenida Artigas, la falta de agua y de inversión necesaria para la realización del esperado evento.

"Nosotros vamos a demandar al Estado paraguayo de este atropello a los familiares del Ycuá Bolaños", dijo Liz Torres, una de las representantes en comunicación con una radio local. Afirmó que tuvieron que hasta comprar el agua y encargarse del sonido del encuentro. 

"Es culpa del Protocolo y seguridad del Estado", afirmó a la 730 AM. Otro punto negativo de la jornada en el Ycuá Bolaños fue la escasa presencia de efectivos policiales en el encuentro. Los presentes apenas pudieron contener a los feligreses y fueron militares y bomberos quienes asistieron a heridos.

Finalmente, solicitaron una investigación de parte del Gobierno para deslindar responsabilidades de lo ocurrido.