La presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, dijo en Roma que ve al Papa Francisco "como un hermano menor", al tiempo que destacó su labor "por la paz en el mundo" y lo alabó al asegurar que es una persona "realmente única".

"Lo veo como un hermano menor porque creo que es una persona realmente única", señaló Carlotto a los medios tras recibir el doctorado cum laude en Lengua y Literatura de la Universidad Roma Tre por el uso que las Abuelas hicieron del arte para expandir la búsqueda de los nietos desaparecidos durante la dictadura político-militar en Argentina (1976-1983).

Carlotto, de 93 años y que mantendrá un encuentro con el pontífice este jueves, sostuvo además que el Papa es "ejemplar", aunque confesó que cuando fue elegido en 2013 exclamó "¡qué barbaridad!" ya que en Argentina era conocido "por ser muy parco" (de pocas palabras).

"Una amiga" de ambos "me dijo que era buenísimo, pero él en Argentina era conocido por ser parco", aseveró, y reconoció su labor "por la paz en el mundo" .

"Está haciendo lo que debe hacer un Papa, que es pedir por la paz para el mundo", manifestó.

La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo lamentó también la negación por parte del actual Gobierno de Javier Milei de que en Argentina desaparecieran 30.000 personas durante la dictadura "porque lo hizo el presidente que votaron todos los argentinos" .

Milei difundió un video en redes sociales el pasado 24 de marzo, cuando se cumplieron 48 años del último golpe de Estado en el país, en el que dice que la cifra la inventó un exguerrillero que estaba exiliado en Países Bajos, lo que calificó como un "gran negocio".

"Nosotros respetamos la voluntad del pueblo, pero él no nos respeta lamentablemente", sostuvo Carlotto.

Esta minimización de los crímenes de la dictadura "confunde, porque la historia no es la que cuenta el Gobierno sino la que está escrita", señaló Carlotto.

En este sentido, aseguró que "la lucha sigue" y que "la violencia y los agravios" no afectarán a su objetivo de encontrar a los cerca de 500 nietos desparecidos durante la dictadura, de los que hasta el momento se ha logrado identificar a 137, incluido el propio nieto de Carlotto.