A los 16 años, Rana Abdelhamid fue abordada en las calles de Nueva York por un hombre que intentó sacarle el pañuelo (hiyab). En lugar de rendirse, Rana convirtió su ira en un programa que trabaja con jóvenes musulmanas para enseñarles autodefensa al tiempo que las anima a convertirse en líderes y modelos de comportamiento para otros en sus comunidades. 

Rana Abdelhamid, dice que los retos que enfrentan los musulmanes en general y las mujeres en especial han empeorado con el tiempo, especialmente desde los ataques de parís y San Bernardino, en California, según informó Economic Times.

"Es lamentable que esto se haya convertido en una necesidad y que recibamos tantas llamadas", dijo Abdelhamid, de 22 años, que se crió en el barrio de Queens, en Nueva York. 

Robina Niaz, directora ejecutiva del grupo Turning Point for Women and Families, declaró:"Rana es el vivo ejemplo de lo que se puede conseguir cuando invertimos en estas jóvenes. Si creemos en ellas, si las apoyamos, vigilamos sus espaldas, solo necesitan un empujoncito y orientación y están listas".