Es José Cardozo, quien quiso pedirle a Francisco que le bendiga unas medallitas y terminó en un puesto policial.
José Cardozo vivió momentos de emoción y tensión a la vez durante su viaje a Polonia, junto a un contingente que sigue al Papa. El sacerdote sanjuanino logró acercarse a Francisco, pero inmediatamente terminó siendo intimado por la Policía de ese país.
Según relató Ricardo Caballero, quien estaba junto a Cardozo, el sacerdote se acercó al Santo Padre para que le bendijera unas medallitas. Si bien logró quedar cerca del Papa, fue frenado por la Policía, que le pidió que volviera a su lugar.
Pero la situación no quedó ahí. Los efectivos volvieron a acercarse al sanjuanino, le pidieron sus credenciales y lo revisaron. Luego, le solicitaron que los acompañara al puesto policial, donde debió permanecer alrededor de una hora. “Lo que pasó es que para las autoridades polacas, el hecho puso en evidencia un descuido de la seguridad y eso lo llevó a actuar”, explicó Caballero.
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