Paquistán; suspenden la pena de Asia Bibi y reexaminan el caso

Paquistán; suspenden la pena de Asia Bibi y reexaminan el caso

Comenzó el proceso ante la Suprema Corte, tercer y último grado de juicio. Siguen vivas las esperanzas para la mujer cristiana condenada a muerte por blasfemia

Por PAOLO AFFATATO

Ya se dio el primer paso. El recurso de Asia Bibi, la mujer cristiana condenada a muerte en Paquistán por blasfemia, fue declarado «admisible» y será examinado por la Suprema Corte de Paquistán, tercer y último grado de juicio. Además, la pena de muerte a la que fue sentenciada la mujer en el proceso en primer grado (y confirmada en apelación) fue suspendida. Asia no corre el riesgo de una ejecución rápida, en un país en el que durante el último año (con el objetivo de derrotar al terrorismo) ha roto todos los récords al ejecutar las sentencias de muerte de más de cien personas. Todo un récord a nivel mundial. 

No disimula, pues, su satisfacción el abogado musulmán Saiful Malooj, defensor de Asia Bibi, cuando anuncia que la Suprema Core acogió las primeras peticiones de la defensa. Como indicó a Vatican Insider, la audiencia que se llevó a cabo hoy 22 de julio por la mañana en el tribunal de Lahore (capital de la provincia del Punjab), se desarrolló sin obstáculos. Malook expuso brevemente ante los jueces las peticiones de la defensa: la absolución porque no hay pruebas insuficientes.

El clima en el aula no era tenso: no había mulás o líderes islámicos que en los procesos anteriores influyeron fuertemente la administración de la justicia. En Paquistán, muy a menudo los tribunales sufren presiones y amenazas por parte de los grupos extremistas, sobre todo en casos sensibles, relacionados con temas importantes para la religión islámica, como el dela blasfemia. Además del abogado Malook, estaban presentes Ashiq Masih, el esposo de Asia Bibi, y Joseph Nadeem, tutor de la familia de Asia y jefe de la Renaissance Education Foundation, que se ocupa de los gastos legales del proceso.

 

Los jueces declararon «admisible» el caso y dispusieron la suspensión de la pena de muerte. La Corte se reservó el examen detallado de los alegatos ya presentados por la defensa de Asia, que serán discutidos en una fase posterior del proceso. Será la cancillería del órgano supremo de justicia la que indique la fecha para la próxima audiencia, sobre la que no es posible hacer ninguna previsión. Podría ser la audiencia decisiva para que se cierre finalmente el caso.

También Joseph Nadeem se mostró aliviado, después de un periodo de mucha tensión en el que se registraron otras amenazas contra la familia de Asia Bibi, después de que un mulá confirmara la recompensa por la cabeza de la mujer cristiana, quien, para los extremistas, seguirá siendo, para siempre, una «blasfema». «El de hoy -declaró Nadeem a la agencia Fides- es un paso importante. Estamos muy satisfechos. Ahora es el momento de rezar juntos al Señor para que se haga justicia y liberen a Asia». 

Asia Bibi será informada en la cárcel sobre el paso tan importante que se ha dado en el proceso en su contra. «Pedimos a las autoridades de la penitenciaría que le dieran la noticia, misma que también fue difundida por los medios masivos de comunicación de Paquistán», explicó Nadeem. Y mañana, día de la visita a la cárcel de Multán, en la que está encerrada Asia, será su marido quien le confirme la noticia de que «la esperanza todavía está viva, y que ahora es necesario intensificar la oración». 

Madre de cinco hijos, Asia ahora tiene 49 años. Ha pasado los últimos seis años de su vida en una celda. Fue arrestada el 19 de junio de 2009 y condenada a muerte por el tribunal de Nakhana en noviembre de 2010. Cuatro años después, en 2014, la Corte de apelación de Lahore confirmó la pena de muerte con un proceso relámpago, e inmediatamente después se presentó un recurso ante la Suprema Corte.

Se encarga ahora de la defensa de Asia el experto abogado musulmán Saiful Malook, ex-procurador de Lahore en el caso de Salman Taseer, el gobernador musulmán del Punjab que fue asesinado en 2011 por su guardaespaldas justamente por haber visitado en la cárcel a Asia Bibi y haber declarad su inocencia. Por el mismo motivo fue asesinado también el político católico Shahbaz Bhatti, entonces ministro federal para las minorías religiosas.

Malook basa su recurso en la insuficiencia de pruebas, e insiste en dos puntos esenciales: el primero es el retraso de cinco días entre el episodio (la presunta blasfemia cometida por la campesina del Punjab) y la presentación de la denuncia ante la policía. En el sistema penal, de hecho, una prueba presentada con retraso con respecto al supuesto delito debe ser considerada «dudosa». 

El segundo aspecto que subraya la defensa está relacionado con las prescripciones de la ley islámica: las declaraciones de los dos testigos según las cuales fue condenada, son, para la defensa, inválidas, pues no responden a los criterios establecidos por la «sharía», que deben ser considerados para los crímenes cometidos «contra Dios» (como en el caso de Asia).

Por lo tanto, Asia debe ser absuelta. Y habrá que ver si la Suprema Corte confirmará la línea de la defensa. En el caso contrario, si se pronunciara una nueva condena (que en este caso sería definitiva), quedaría solo la posibilidad de la gracia presidencial, que puede cambiar la pena.

Comentá la nota