Durante su homilía de la primera misa del domingo de Pascuas, el obispo diocesano monseñor Vicente Bokalic llamó a los fieles a vivir con amor, fidelidad, fe y esperanza en el Cristo resucitado.

El prelado presidió a las nueve de la mañana la misa comunitaria que se celebró en el templo del convento de las Hermanas Benedictinas, y que contó con la presencia de una gran cantidad de fieles.

En su mensaje hizo alusión directa a las religiosas, y les pidió "una fidelidad fuerte" para poder servir y llegar allí donde están quienes más necesitan del consuelo y de la contención.

Testimonio

"El señor ha resucitado. Ha vencido por amor. Seguimos a veces, viviendo en el miedo, miedo a ser testigos valientes de nuestra fe, de anunciar a Jesús, allí donde nos ha elegido el Señor, en nuestras familias, en nuestro trabajo. Tenemos miedo de jugarnos por nuestros valores de la fe. Tenemos miedo de jugarnos por la verdad, transamos con la hipocresía. Tenemos miedo de trabajar esos valores de la justicia que nos devuelven dignidad y esperanza", acotó.

La noche del sábado, en una de las celebraciones más importantes del calendario litúrgico católico, el obispo Vicente Bokalic hizo un llamado a los fieles a que "pierdan el miedo que nos encierra, que nos paraliza y caminemos con Jesús. Anunciemos que Él está vivo. Vayamos a las periferias a dar testimonio".

Periferias

En otro momento, monseñor Bokalic pidió ir a las periferias de nuestras vidas para encontrarnos con Jesús, "lugares donde la fe y la vida siguen amenazados, en tantas familias, jóvenes abandonados, sin posibilidades, solos, a la merced de algunos que trafican con sus vidas".

"A donde están los abuelos en la soledad, en las tristezas, donde están los niños que no tiene el calor del hogar, vayamos a anunciarles a Jesús. Allí nos espera el Señor. La vida ha vencido a la muerte. La verdad es más fuerte que la mentira", reflexionó finalmente.