El vicario general de la diócesis animó a los uniformados a "comprometerse como cristianos en todo lo que se puede entregar a la sociedad", para "ennoblecer esta fuerza con su vocación".
Con motivo de celebrarse un nuevo aniversario de la Policía Federal Argentina, el vicario general de la diócesis de Goya, presbítero Juan Carlos López, presidió en la mañana del jueves 3 de noviembre la misa por esa fuerza de seguridad en la Catedral Nuestra Señora del Rosario, que concelebró el capellán de la región NEA de la institución, presbítero Juan Andrés Rojas.
Participaron de la Eucaristía la jefa de la delegación local de la Policía Federal Argentina, comisario Valeria Castillo; el jefe del Batallón de Ingenieros de Monte 12, teniente coronel Nicolás Gerardo Pietrobelli; el jefe de la subprefectura; el segundo jefe del cuerpo activo de bomberos voluntarios, comandante mayor Julio Cesar Bejarano; representaciones de oficiales, suboficiales, auxiliares y personal de la dependencia de Delitos Complejos con asiento en Goya, entre otros invitados.
En la homilía, el vicario general invitó a los presentes a dar gracias a Dios, “que es fuente de todos los dones”, y los alentó a vivir su vocación de servicio siempre invocando la protección de la Madre y Patrona de la Institución, la Virgen de Luján. También agradeció la presencia del capellán de la región, el presbítero Juan Andrés Rojas.
Al reflexionar sobre el Evangelio proclamado (Lucas 15, 1-10), destacó que es en “las tres parábolas de la misericordia” donde “Jesús nos revela cómo es el rostro del Padre”. “Nuestro Dios es el Dios de la compasión y de la misericordia, que vino a rescatar lo perdido. La misión de Jesús es levantar al caído”, subrayó.
Además, enfatizó que los servidores públicos “están para dar dignidad y prevenir situaciones”, al tiempo que destacó las diversas funciones que cumple la institución, señalando lo abarcativa que es esta fuerza de seguridad en todo el país.
“¡Cuántos desafíos y cuántas situaciones que reclaman personal especializado y capacitado para enfrentar estas realidades, cada vez más complejas, en el mundo de hoy! Yo no dudo de que en el mundo son mayoría la gente buena y que tienen interés en hacer las cosas bien y son buenos, pero el mal está organizado”, sentenció.
Luego animó a los presentes a “ennoblecer esta fuerza con vocación y servicio”, teniendo un corazón agradecido, y a “comprometerse como cristianos en todo lo que se puede entregar a la sociedad”.
“Una cosa es trabajar de policía y otra es ser policía”, expresó, alentando a los uniformados a “renovar su vocación de servicio y de entrega, para ennoblecer la fuerza y desafiar tantas realidades que hoy nos reclaman”.
Finalmente, encomendó a la Policía Federal Argentina a su patrona, la Virgen de Luján, para que Ella acompañe con su intercesión el trabajo de cada uno de los policías, “que no siempre es fácil, es muy arriesgado y comprometido". "Que la maternidad de María interceda por todas las necesidades de este momento presente”, finalizó.
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