De acuerdo con la ley, el Parlamento israelí (Knesset) puede expulsar a un legislador por "incitar al racismo" y "apoyar la lucha armada" contra el Estado de Israel. El texto se aprobó con una mayoría de 90 legisladores.
La nueva versión del proyecto de ley requiere la aprobación de 70 de los 120 miembros de la Knesset, (incluyendo 10 de la oposición) para poner en marcha los procedimientos de expulsión. La versión original del documento sólo requiere el respaldo de 61 diputados para poner en marcha el proceso, y no necesariamente a nadie de la oposición.
Los miembros del partido árabe, Lista Conjunta, dijeron que tienen la intención de apelar al Tribunal Supremo en contra de la ley.
El diputado Nissan Slomiansky (Habait Hayehudi) rechazó las afirmaciones de que la ley está dirigida a los legisladores árabes. “Es sabido que, en realidad , la única vez que este prodecimiento se utilizó fue en contra de Judíos” dijo, refiriéndose a la derecha extremista Meir Kahane, que fue descalificado como candidato a la Knesset en la década de 1980.
Según el proyecto, un proceso de expulsión se iniciaría con una petición presentada al presidente del Parlamento israelí, que lo enviaría a la Constitución de la Knesset, Ley y Justicia. La aprobación deberá contar con tres cuartas partes de los miembros del comité, antes de ir al pleno de la Knesset. Cualquier diputado depuesto sería capaz de apelar la decisión ante el Tribunal Supremo. Los procedimientos de suspensión no podrían comenzar durante una campaña electoral.
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