Los vándalos tiraron piedras contra el edificio de la Iglesia y pintaron las frases "Free Gaza" y "Cierre los campos KZ" en la puerta principal de la iglesia. Bent Melchior manifestó al respeto: "No es por ser inmodesto, pero debo admitir que esto era para mí. Me entristece ver que hay idiotas por ahí y siento que yo fui la causa de algo como esto". La policía dinamarquesa está intentando identificar y detener a los vándalos, y considera lo ocurrido como un incidente "motivado políticamente". 

La pequeña comunidad judía de Dinamarca, de unos 8.000 miembros, está muy preocupada luego de que el 14 y 15 de febrero Omar El-Hussein disparara y matara a un guardia voluntario judío fuera de la sinagoga de Copenhague en uno de los dos tiroteos que protagonizó.

La comunidad pidió protección policial en enero tras el asesinato de cuatro judíos en un supermercado kosher de París. Antes de esto se había anunciado el aumento de actos antisemitas en el país.