Además aseguró que su superior siempre se burlaba de él ante otros gestores de la compañía, en la que trabajaba desde el 2010. La empresa desestimó las acusaciones y afirmó que el hombre americano había cometido repetidamente errores graves y no cumplía con los estándares de la compañía.
Un ex empleado del área de seguridad de Revlon, Alan Meyers, ha iniciado una demando contra la empresa internacional de cosméticos por haberlo despedido por ser judío. Además aseguró que su superior, el CEO Lorenzo Delpani, siempre se burlaba de él ante otros gestores de la compañía, en la que trabajaba desde el 2010.
La empresa desestimó las acusaciones y afirmó que el hombre americano había cometido repetidamente errores graves y no cumplía con los estándares de cumplimiento de su trabajo que requieren de sus empleados.
Meyers también aseguró que su superior desestimó informaciones elaboradas por él relacionadas con problemas de seguridad existentes un una planta industrial de Revlon ubicada en Carolina del Norte, Estados Unidos.
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