En contacto con la emisora Conejero Gallego dijo "a este acontecimiento hay que darle la importancia y la trascendencia que merece, es motivo para dar gracias a Dios, de que un sacerdote de la Diócesis de Formosa, haya sido elegido para ser uno de los sucesores de los apóstoles, que esta es la vocación y misión de todo obispo".

Detalló "lo más grande de nuestra vocación es ser continuadores de la misión de los apóstoles, que eran los que estaban más cerca de Jesús, para conducir una iglesia particular, porque en una diócesis se han todas las notas características de esta iglesia universal católica a la que pertenecemos".

Por último enfatizó "este es un motivo, de gozo, de alegría, de acción de gracia, de júbilo para todos los formoseños".