"Hay mucha movilización de todas las partes que participan de la contienda, se elige una nueva asamblea nacional con 167diputados, pero es importante porque según las encuestas, al menos por primera vez la oposición venezolana tiene la posibilidad clara de tener una mayoría. Hay muchísima movilización, muchísimo interés, hay un nivel de participación muy alto. Se estimó el 70 y el 75 por ciento de participación de la población, lo cual es realmente impresionante. Esperamos que transcurra en un ambiente de paz y tranquilidad y que se abra un rendija de esperanza de futuro para todo Venezuela", afirmó Fred Pressner, ex presidente de la Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela (CAIV) y consejero del Instituto Latino y Latinoamericano del Comité Judío Americano (AJC, por sus siglas en inglés) en diálogo con la Agencia Judía de Noticias.

En cuanto a las expectativas en la comunidad judía sobre las elecciones que se realizarán el domingo 6, expresó: “Son las mismas que las expectativas a nivel nacional, somos una minoría que somos venezolanos, que hemos nacido acá, crecido acá, hemos establecido nuestras familias, nuestras profesiones, realmente estamos dentro del mismo grupo, un sólo deseo común para todos los venezolanos de que Venezuela vuelva a ser una nación prospera, una nación que pueda progresar y que sea nuevamente un hogar lleno de esperanzas y de desarrollos para todos”. 

“Uno de los temas centrales para la comunidad ha sido siempre el restablecimiento de los lazos diplomáticos entre Venezuela e Israel. La comunidad judía de Venezuela siempre ha pedido formalmente en conversaciones con el gobierno que Venezuela e Israel vuelvan a reestablecer relaciones diplomáticas, eso nunca va a cesar en nuestra petición", destacó.

"Este tipo de decisiones dependen de situaciones de política que se estén dando en algún momento. Nuestra solicitud, nuestro deseo, sería bien visto independientemente si de la oposición o del gobierno. Lamentablemente todos los escenarios que hemos visto de tragedias, como el atentado en Beirut, el atentado en París o los continuos ataques a civiles en Israel. Vemos este tipo de cosas, a todos los sensibilizan, es posible que el raciocinio prevalezca sobre otras cosas, sobre ideologías y que nosotros podamos avanzar y podamos ver, en el caso particular de Venezuela, otra vez ondear la bandera de Israel en una sede diplomática en Caracas", subrayó.

Respecto al momento en el que la cerraron la embajada de Israel en Caracas en 2009, Pressner recordó: "Fue muy duro, para hacer un paralelismo, es como que en una familia que tu papá y tu mamá abandonan a sus hijos, pero no voluntariamente. Para nosotros nuestro lazo con Israel es inquebrantable, y se mantendrá siempre no importa qué evento suceda. Para nosotros Israel es importante, es también nuestro país. Fue muy difícil, me tocó a mí despedir al embajador cuando todavía era presidente de la comunidad. Recuerdo que fuimos lloramos. Un sentimiento de hermandad que creo que la comunidad nunca sintió. Estamos hablando de una relación de más de 50 años. Para nosotros entender lo que pasó fue difícil, ver la bandera de Israel bajar del lugar donde estaba la embajada o que la residencia del embajador se clausure, fue algo muy traumático. Desde la comunidad siempre solicitaremos al gobierno nacional, siempre tendremos presente nuestro profundo deseo que se reestablezcan las relaciones con Israel”. 

Finalmente, sobre la relación de la comunidad judía con el actual gobierno de Venezuela, opinó: "Yo siempre parto de una base donde no acentúo nuestras diferencias, más bien las cosas que nosotros creemos. La relación es de respeto, de cierta distancia porque tenemos distintas visiones. Visiones de temas culturales, de los valores que nosotros creemos. Uno siempre tiene que hacer ver a la otra parte con la cual mantiene alguna conversación las cosas que uno cree. El pueblo judío está profundamente orgulloso de las contribuciones que ha hecho a la humanidad. Desde la religión, la ciencia, la tecnología, el ejemplo que Israel da al mundo, sus avances, los premios Nobel, no importa lo que sea. Nosotros estamos profundamente orgullosos de los aportes que hicimos, creemos en nuestros valores, creemos en nuestro judaísmo y creemos en Israel. Yo creo que la relación con el gobierno es respetuosa, cada uno con sus creencias y sus visiones del mundo que son perfectamente válidas. Deseamos obviamente tener una relación cercana, una relación profunda, positiva, una relación en la que podamos seguir aportando al país, porque somos parte de él. Ojalá que la Asamblea sea un factor de influencia para que nuestros deseos de paz y prosperidad que queremos para nuestro país, junto al deseo de restablecimiento de las relaciones con Israel se hagan realidad".