Por Israel González Espinoza

La mañana de este 2 de marzo la Asamblea Nacional de Nicaragua (unicameral, y dominada por partido de gobierno), aprobó nombrar al arzobispo emérito de Managua, Cardenal Miguel Obando y Bravo como "prócer nacional de la paz y la reconciliación".

El voto mayoritario del partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, izquierda en poder desde 2007) más el de dos diputados aliados completaron los 65 votos que designaron a Obando y Bravo como "prócer nacional" de este país centroamericano, ratificando la iniciativa de ley que fue enviada a inicios de febrero por el presidente Daniel Ortega.

Según la ley aprobada hoy por el Legislativo, Obando y Bravo será incluido dentro de los próceres de Nicaragua, un mérito que compartirá desde ahora con los líderes independentistas Don Miguel de Larreynaga y el sacerdote indígena Tomás Ruiz.

La iniciativa del Ejecutivo nicaragüense de nombrar al arzobispo emérito Obando y Bravo no ha sentado bien en la oposición política que ve en la designación "un regalo" al prelado, otrora detractor del sandinismo y ahora aliado del gobierno de Ortega.

El día de hoy, fue notoria la ausencia de los diputados de oposición en el hemiciclo parlamentario donde se discutía la designación de Obando y Bravo como prócer. Losmedios de comunicación aliados al FSLN han tildado de "mezquina" la actitud de los opositores al gobierno.

Durante la discusión de la iniciativa de ley, 35 diputados tomaron la palabra, la mayoría del partido oficialista elogiando la labor de Miguel Obando y Bravo como mediador político entre las décadas de 1970 a 1990, así como su labor pastoral y de enseñanza.

"Creo que nombrarlo prócer en vida es más que justo y correcto", dijo el diputado sandinista Jacinto Suárez. "Los que estamos presentes en este hemiciclo nos regocijamos porque es un día del deber cumplido con la historia", dijo el diputado Edwin Castro, jefe de la bancada oficialista en el Parlamento. 

En días pasado, el arzobispo emérito Miguel Obando y Bravo calificó como un gesto de "bondad" la iniciativa de ley para nombrarlo prócer nacional. "Es una gentileza del señor presidente proponerme ser prócer de la paz. Le agradezco sus muestras de fineza y que estemos unidos en la oración, que es importante", expresó el prelado, quién recientemente cumplió 90 años.

Pese a las críticas de la oposición y la rapidez con la que se realizó el dictamen de ley que declara a Obando y Bravo "prócer" de la historia nacional, la medida fue apoyada por la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) en la persona del obispo de León, Bosco Vivas Robelo y por la Coordinadora Evangélica que preside el pastor Miguel Ángel Casco.

¿Quién es Miguel Obando y Bravo?

Nació en 1926 en el seno de una familia humilde en el poblado de La Libertad, departamento de Chontales (centro de Nicaragua). Se ordenó como sacerdote salesiano en 1958. Fue electo obispo auxiliar de Matagalpa en 1968 y fue nombrado arzobispo metropolitano de Managua en 1970 por Pablo VI.

En 1985, Juan Pablo II lo elevó al cardenalato siendo el primer prelado centroamericano en recibir la dignidad cardenalicia. En 2005 cesó como arzobispo siendo sucedido por el cardenal Leopoldo Brenes Solórzano, actual arzobispo de Managua.

De profesión físico-matemático, Obando y Bravo es conocido en Nicaragua por su labor mediadora en diversos acontecimientos políticos que han ocurrido durante su gobierno episcopal. En la década de 1970, fue mediador dos veces entre la guerrilla sandinista y el gobierno del dictador Anastasio Somoza Debayle, cuando la primera asestó duros golpes a los aparatos burocráticos del régimen.

En la siguiente década, lideró la oposición a la Revolución Popular Sandinista (1979- 1990) y a la Iglesia comprometida con los pobres, denominada también como "Iglesia popular" por la jerarquía católica de aquellos años, que estaba compuesta de sacerdotes, religiosas y laicos comprometidos con el proceso revolucionario.

Entre 1988 y 1990 fue garante de los acuerdos de paz en Sapoá, entre el gobierno del FSLN y la contrarrevolución que culminó con la celebración de las primeras elecciones democráticas y la pacificación del país.

Desde el regreso del socialista Daniel Ortega al poder en 2007, ha sido un cercano aliado del mandatario y su esposa Rosario Murillo, quien lo nombró coordinador del Consejo de Reconciliación Nacional. Actualmente su papel es criticado en la Iglesia y la oposición porque estos grupos consideran que el gobierno utiliza su figura religiosa para fines políticos.

Así mismo Obando y Bravo preside el consejo directivo de la Universidad Católica de Managua (UNICA) y es dueño de una modesta emisora de corte católico que posee cobertura nacional.